El pizpireto cómico David Puerto (Madrid, 1994) fusiona con maestría la interacción con el público, el 'stand up', la música y la improvisación. Con su peculiar pitorreo y ese aspecto de no haber roto nunca un plato, logra convertir cualquier charleta en regocijo colectivo. Su último espectáculo se titula Bien, pero -con permiso- debería ser Muy bien. Por el tiempo que lleva probando cada detalle y por envolver al público con ritmo, empatía guasona y chispazos desternillantes como solo saben hacer los grandes del ‘crowdwork’.
Célebre en las redes sociales y en salas por doquier, David Puerto está actuando -hoy por hoy- en el Teatro Arlequín de Madrid, aunque quizá lo veáis también en otros templos como el Beer Station grabando -junto al mítico Agustín Jiménez- el podcast Pan de gambas. Su genuina propuesta -risa y reflexión mediante- toma escenarios por toda España, un país que -como afirma nuestro invitado, admirador del talento humorístico patrio- "es pura comedia". Sí, había varios titulares más, pero esta frase está realmente ‘Bien’. Otra opción -con su sorna habitual- decía: "¡Venid a ver mi show y dejaos de tonterías!". ¡Vamos!
¡Bienvenido a Godot el gran David Puerto!
¿Cómo te definirías a ti mismo a estas alturas del show?
Después de todo el tiempo que llevo trabajando en este show, he conseguido que todo encaje de una forma muy natural. Y que esté más que garantizado que el público disfrute de una experiencia única en cada show.
Para quien viva en otro mundo y no te haya visto ni siquiera en un ‘reel’… ¿cómo es tu estilo de comedia?
Creo que se basa en la verdad, en la realidad tanto mía como de la gente: me gusta que todo el mundo se sienta partícipe y que todo el mundo entienda todo. Pero, vaya, a grandes rasgos, interactúo con el público y busco que cualquier conversación banal se enrede hasta conseguir la comedia.
¿Por qué ir a ver tus espectáculos? ¿Todo Bien, como el título de tu último trabajo?
Creo que cada uno de mis espectáculos es una buena oportunidad para reírse; y digo yo: ¿por qué perder esa oportunidad? Y sí… todo bien. Ha sido una época muy complicada a nivel personal, pero trabajar en este show me ha ayudado mucho a enfocarme en lo importante. Cuando estrené el espectáculo quería que la gente se fuera del teatro pensando: “¡Qué bueno es, qué bien lo hace!” -y de ahí el nombre-, pero me di cuenta de que no… No tienen que pensar en lo bien que lo hago yo, sino en lo bien que se lo he hecho pasar y ahora solo quiero que la gente se vaya diciendo: “¡Qué bien me lo he pasado!”. Y si no se acuerdan ni de mí… ¡también está bien!
¿Recuerdas la primera vez (en escena) o algún pinchazo épico, David?
Sí, la recuerdo con mucho cariño; de hecho, hay un vídeo en internet que no puedo borrar porque perdí la cuenta y me da mucha vergüenza… Hacía muchas cosas mal que ni sabía, pero tenía muchas ganas de aprender. Y esas ganas siguen intactas.
¿Quiénes son tus referentes del ‘stand up’, de aquí o allá?
Mis referentes son españoles. Consumo comedia de todo el mundo, pero la gente que me inspiró a dedicarme a esto son Agustín Jiménez -quien empezó siendo mi profesor y hoy tengo la suerte de trabajar con él en nuestro podcast Pan de gambas-, Eva Hache, Luis Piedrahita, Ana Morgade, Jaime Figueroa, Lina Morgan y, bueno, toda la gente que ha hecho humor y que nos ha creado el camino por el que ahora andamos.
Ahora lanzo un test raudo…
-La cultura para ti es: Esencial.
-Las redes sociales son: Un medio que usar como altavoz para promocionar tu trabajo, nunca un fin.
-Stand up comedy: Mi forma de entender la vida.
-Crowdwork (interacción con el público): El fruto de mi dispersión.
-Pizpireto: David Puerto.
-Etiqueta Negra Producciones: Familia.
-Un lugar en la vida para reír a carcajadas: España. Este país es pura comedia.
Vuelta a las preguntas sin límite. Va un clásico… Sí, mi mantra en RNE y otros medios, como Godot… ¿Vivimos una edad de oro del ‘stand up’, los podcasts de humor, la escena cómica, los ‘late nights’?
Definitivamente sí. Con un teléfono se puede editar, grabar, subir, retocar, escribir… y mil cosas más. Y eso hace que la producción de cualquier formato sea mucho más sencilla y accesible, lo que ha hecho que nuevas propuestas de comedia tengan cabida en muchos más lugares.
¿Alguna cuestión clave que me deje en el tintero?
¡Venid a ver mi show y dejaos de tonterías! (Risas).
Premisa y remate final… ¿Un mensaje para la posteridad desde Godot?
¡Gracias por apoyar y seguir a la comedia! ¡Larga vida a la comedia y larga vida a Godot! ¡Gracias y un abrazo, Jorge!
¡Gracias y viva la comedia, querido David Puerto Sansón! Y que vaya todo Bien.