Fotos: Jero Morales
Pandataria es una isla perteneciente al archipiélago de las Pontinas, en el mar Tirreno, y mide 1,54 km2. En la época de la dinastía Julio-Claudia, las mujeres del imperio que no se adecuaban a las normas (adúlteras, poderosas, independientes, políticas…) eran exiliadas a la isla.
En 1941, Spinelli, Rossi y Colorni acabaron en la misma isla-prisión por orden de Mussolini. Habían puesto en duda la llegada al poder del dictador. Allí, redactaron el manifiesto: Por una Europa libre y unida.
Y eso es Pandataria: el cajón de sastre, la isla prisión, la isla del marginado, del que no forma parte de la norma, del que viene del lote defectuoso, del que no es un ciudadano legal, la isla de los que sobran, de los que tambalean el mundo, de los que no son válidos. Pandataria es, por lo tanto, una utopía necesaria. Un lugar al que aspiramos llegar para eliminar esas fronteras y demostrar que todo ser humano es válido.