En un tiempo lejano, agricultores y ganaderos de España se enfrentaban duramente por el derecho a la explotación de las tierras. Esta lucha intestina que generaba discordia hasta dentro de las familias, pudo acabar solo con la intervención de los reyes y la firma del ‘Tratado de la Mesta’ en la Ciudad de Gualda.
En este lugar de La Mancha, Aquilina última hija de un agricultor, tiene que enfrentarse a una muy difícil situación: el incendio del cobertizo de su casa, la enfermedad de la madre y la huida del hermano mayor que quiere unirse al gremio de los ganaderos en contra de la voluntad del padre. Aquilina decidirá tomar las riendas de su familia rompiendo con las normas que impone la sociedad de la época e inicia un viaje hacia la ciudad a través del cual se encontrará con circunstancias y personajes curiosos que la ayudaran en su conquista superando trabas y encontrando caminos de sabiduría. Un final feliz con un público que ayudará a lo que sea.