“Quien menosprecia la cultura demuestra estar hueco por dentro”
Nuestro invitado es el gran Lalo Tenorio. Cómico de ‘stand up comedy’, guionista y, como él dice en las redes, “cansado de parecer ingenioso en su bio”. Pero lo parece… y lo es. Pese a su talentosa precocidad en el mundo del humor y los medios, ya atesora varios proyectos y apariciones formidables. Porque Lalo Tenorio no ha parado ni siquiera en esta época turbulenta.
Y nos lo cuenta en Godot, celebrando siempre la comedia como gran “mecanismo de defensa” y esa “necesidad de no tomarse las cosas en serio”. Y sí, ahí van Comedy Central, Phi Beta Lambda, Comedy Fight Club, Loco Mundo, Faking Madafakas… Un currículum estupendo para este “cómico ya no tan joven” que suma y sigue. ¡Bienvenido, Lalo Tenorio!
Lalo Tenorio, ese cómico ya no tan joven
Por Jorge Gª Palomo/@jorgegpalomo
Foto de portada: Alejandro Famos
¿Cómo se definiría Lalo Tenorio a estas alturas?
Ese cómico ya no tan joven. Aunque cuando un desconocido me pregunta, me defino como ‘guionista’. Porque es lo que paga mi alquiler y porque es más fácil de asimilar. Nadie te pide que le escribas algo ahí mismo o que demuestres que eres muy gracioso.
¿Dónde podemos verte y reír contigo?
No estoy actuando mucho, pero se me puede seguir viendo algún día en un show llamado Faking Madafakas. Es un espectáculo de sketches, improvisación y monólogos bastante experimental. Somos varios amigos: Diego Fabiano, Litos Fernández, Sergio Bezos, Dani Piqueras, Urko Vázquez y yo. Creo que es bastante divertido de ver porque nos divertimos mucho haciéndolo.
¿Cómo estás llevando esta época aciaga, amigo?
Pues he tenido muchísima suerte, la verdad. He estado trabajando en un par de programas desde casa y, además, me han ido llamando para hacer varias cosas de actor. En verano estuve rodando una película, una comedia con grandes nombres que se estrenará este año.
El humor para ti es…
Un mecanismo de defensa, un idioma, una cobardía… Depende del día en que me preguntes. Supongo que es la necesidad de no tomarse las cosas en serio. Por ejemplo, es sentir que debo meter un chascarrillo al final de esta respuesta para que no quede demasiado académica.
La cultura es…
Creo que el mundo nos da unos ladrillos y que la cultura es el cemento sin el que solo somos escombros. Y está en todo, para mí el deporte también es cultura, por ejemplo. No confío en la gente sin intereses culturales. Quien menosprecia la cultura demuestra estar hueco por dentro.
Las redes sociales son al humor…
Lo que un microondas a una cocina. Es muy práctico, muy útil y yo lo uso a menudo. Pero no es lo ideal que todo pase por ahí, ni se puede hacer todo.
¿Cómo te inspiras? ¿Cómo es tu día a día, Lalo?
Me vienen ideas montando en bici, escuchando música, fregando los platos y, en general, en cualquier momento en el que no esté pensando en ser productivo. Mi día a día es lo opuesto: estoy constantemente obligándome a ser productivo y culpabilizándome por no serlo. Siempre estoy muy inspirado para hacer lo que no debo.
¿Qué y quiénes te hacen reír?
Muchísimas cosas. A veces pienso que mi cabeza anda engañándome para hacerme creer que las cosas son más divertidas de lo que son para no desesperarme. Luego me hacen reír, sobre todo, Los Simpson, los sketches absurdos, el descaro de Sacha Baron Cohen o la mayoría de mis amistades dentro y fuera de la comedia. Aunque mis humoristas favoritos no suelen ser los que más me hacen reír.
¿Vivimos una edad de oro del humor? Siempre lo subrayo en La Sala de RNE (con Dani Galindo).
Puede ser. Si no entendemos la situación del humor únicamente como lo conocido o lo que trasciende, creo que sí. Tenemos mucha variedad, referentes heterogéneos, medios de expresión… Además, estamos en un momento de abrazar lo cutre y se amplían las posibilidades.
Conceptos unidos a ti… Tipo test de respuestas muy breves.
- Stand up comedy… La forma que tuve de desarrollarme.
- Comedy Central… Mi primer objetivo cumplido.
- Phi Beta Lambda… Los que mantienen el abanico abierto.
- Bar Picnic… Un hogar y un laboratorio. También un bar, pero menos.
- Comedy Fight Club… Unos cabrones de mierda. (Lo puedo decir porque uno soy yo.)
- Loco Mundo… La oportunidad de filosofar con Ignatius.
- Ese programa del que usted me habla… Un equipo increíble y mi oportunidad de hacer sketches en TV.
- Medina de Rioseco… El lugar de mi debut.
¿Cómo fue tu primera vez… en escena?
Terrible. Tenía 15 años. Un concurso en las fiestas de un pueblo lejos de mi casa. Vomité dos veces antes de actuar y salí en una plaza ante cientos de desconocidos sentados en sillas plegables. Lo hice mal, pero algunos de los cómicos más experimentados que participaron me animaron con ímpetu a seguir y me invitaron a actuar otro día con ellos. Gracias a ellos (Patri de la Fuente, Juan Sinde y Felipe Martín) y a mi afición por pasarlo mal sobre un escenario, seguí en esto.
Un momento inolvidable o una anécdota fuera de los escenarios…
Creo que ninguna de mis anécdotas que merecen la pena de verdad podría ser contada aquí. He conocido a mucha gente interesante, he vivido momentos divertidos, pero he desarrollado una tolerancia a las situaciones locas un poco preocupante (Risas nerviosas).
Un teatro o lugar para reír a carcajadas. De Madrid o el mundo entero.
En Madrid hay muchos sitios que acogen comedia. Nosotros estamos en el OFF Latina, que es un sitio muy guay. Pero también hay muy buenos espectáculos en El Palacio de la Prensa, Teatro Alcázar, Teatro de las Aguas, en Beer Station y El Golfo Comedy Club que acaba de abrir sus puertas… Merece la pena cualquier cosa que haga La Llama en Barcelona o Sala Trampa en Palma. Fuera de España he salido poco a ver espectáculos y ha sido para ver a gente concreta. Y echo de menos las noches de ‘open mic’ en Picnic.
Una película o varias para sentirnos bien en épocas difíciles.
Creo que la peli paradigmática para ‘sentirnos bien’ puede ser Forrest Gump, pero yo suelo buscar que, si estoy mal, la peli esté en mi misma onda. Suelo recomendar American Pop, de Ralph Bakshi.
Algo que me haya olvidado y te parezca ignominioso que se me olvide, que para lo joven que eres tienes un currículum muy loco…
He tenido la fortuna de trabajar en muchas cosas y muy diferentes. Y me alegro de que no se sepan todas. La que cuento a veces por rara es cuando me contrataron para hacer un monólogo, como si fuera un espontáneo del público, entre una charla del hijo de Pablo Escobar y otra de un superviviente del accidente de ‘Viven’. En mi currículum tengo que poner las cosas aburridas.
Un mensaje a los lectores de Godot y teatreros del mundo, amantes de la cultura, el sexo salvaje y los espectáculos más osados…
¡Gracias por leer! Pero la entrevista era más graciosa si mis respuestas las leías con la voz de la anciana del Titanic, has perdido esa oportunidad.
¡Gracias, Lalo! ¡Gran esperanza del ‘stand up’! ¡Viva la comedia!