La Técnica de Interpretación LÓGICA ESCÉNICA es un conjunto de herramientas para construir personajes y verdad en la escena. Así como se usa técnica para cantar, para tocar el piano, o para pintar, también es esencial disponer de técnica para interpretar. Por medio de la técnica, el actor o la actriz sabrá cómo afrontar un texto, cómo construir un personaje y una escena y dirigir su trabajo para convertirse en un artista libre e independiente.

Si partimos de las vivencias personales, no estaremos construyendo un personaje, estaremos recurriendo a nuestro ‘yo’, y este ‘yo’ está plagado de prejuicios, ya que está condicionado por la imagen que queremos imponernos a nosotros mismos y a los demás. Alimentar mecanismos de introspección nos instala en el narcisismo, alejándonos del encuentro con el ‘otro’. El personaje se construye en el intercambio con el ‘otro’. La interpretación es el arte de los vínculos. Y son los vínculos, construidos en el ensayo, los que hacen que la escena sea ‘de verdad’. Si llevamos al ensayo nuestros vínculos personales no haremos más que contaminar la experiencia creativa. Por supuesto que el aprendizaje sólo se adquiere por medio de la experiencia, pero construir personajes es crear conductas diferentes a las propias. Y estas conductas solo podrán ser descubiertas a través de la experiencia del ensayo. Así, el actor o la actriz, dejará de ser un imitador de conductas para convertirse en un verdadero artista.

La técnica ha sido creada y desarrollada por Bárbara Merlo. Se llama LÓGICA ESCÉNICA porque la construcción de la escena debe tener una lógica, pero esa lógica tiene que estar sujeta a la lógica que propone la misma y no a la ‘lógica’ que utilizamos en nuestra vida personal. Cada texto propone una estética diferente y el actor o la actriz debe ser consciente de ello. No hay que confundir ser natural con tener verdad. El naturalismo es una estética, pero hay muchas más. Y analizar todo el material teatral existente desde una perspectiva psicológica y realista reduce el acto creativo a una mediocre copia de la vida. El teatro no es la vida real. Es arte. Es convención. Si tomamos la vida como referencia, ¿qué ocurre con un personaje que vuela? El sentido de la verdad va a depender de la coherencia entre nuestro trabajo como intérpretes y la lógica de la escena que queramos representar.

El cuerpo del actor o la actriz tiene que ser el punto de partida para la creación pues es su herramienta de trabajo. Y son parte del cuerpo la voz, los pensamientos, las emociones y el alma. Pero, partir de las emociones genera frustración, ya que los sentimientos y las emociones no se ajustan a nuestra voluntad. Ojalá uno pudiera decidir cuándo está triste o contento, o de quién se enamora. El actor es el que HACE, es el que ACTÚA. Lo que ve el espectador es la ACCIÓN.

La Técnica se imparte en toda la oferta formativa de la Compañía de Teatro PRESENTE: Diplomatura en Interpretación, Interpretación y Puesta en Escena Teatral, Interpretación ante la Cámara (incluye Videobook Profesional), Iniciación a la Interpretación y Taller de Improvisación Teatral.

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