Estas son las impresiones que nos ha hecho llegar Miguel Torres, gerente e impulsor de Teatro Lagrada, acerca de cómo la crisis del COVID-19 afectará a su espacio.
Lo primero de todo: ¿Cómo estáis?
No estamos infectados que no es poco, pero sí preocupados por las consecuencias que una pandemia intensa y extensa en el tiempo pueda ocasionar
Con la actividad escénica interrumpida, ¿estáis pudiendo desarrollar otras actividades: gestión, contacto con las instituciones, preparación y difusión de recursos digitales…?
Toda la energía está puesta en las negociaciones con las administraciones para encontrar soluciones que faciliten no tener que echar el cierre ahora ni cuando se soluciones la crisis, ERTES, autónomos, alquileres….
Cuando escucháis lo del teletrabajo como recomendación gubernamental: ¿qué sentís?
Yo creo que al mundo mundial ‘esto’ le ha pillado con el paso cambiado, tiempo habrá de analizar las causas, y sí, conozco gente que puede trabajar telemáticamente, está el problema de los niños en casa, los mayores en su casa o una residencia, pero por otro lado, parar el mundo sería para apearnos, no sé, es difícil analizar la situación y más difícil diseñar soluciones. Yo en condiciones normales teletrabajo muchas veces desde casa pero enfocado a una actividad real, ahora no tiene sentido en nuestro gremio trabajar telemáticamente porque no hay el qué.
¿Cuántas personas trabajaban en vuestra sala habitualmente?
Tres, en plantilla más todas la compañías que se han quedado sin trabajar
¿Qué ha supuesto esta situación para vosotros a nivel de puestos de trabajo de forma directa? ¿Habéis tenido que prescindir de alguien o podéis mantener todos los puestos?
Las dos trabajadoras eran fijas indefinidas por lo que hemos solicitado un ERTE, con la promesa, y el propósito de volverlas a contratar de nuevo cuando podamos abrir de nuevo el teatro, y yo que al ser socio de la empresa tengo que estar en el régimen de autónomos me adheriré a la normativa de ayudas que publique el gobierno.
E indirectamente ¿Cuántos espectáculos vamos a dejar de ver en vuestra sala y cuántas compañías se ven afectadas?
De momento seis y el mismo número de compañías. Estoy calculando hasta el 30 de Abril pero posiblemente se prolongue el confinamiento.
¿Qué impacto económico mensual va a tener para vosotros?
Gastos fijos 6.500 euros aproximadamente. Dejaremos de ingresar por taquilla y estamos negociando el tema de ayudas públicas para que no se recorten en aras de tener menos actividad y que se hagan efectivas dentro del año, si no sería la ruina.
A nivel de instalaciones, ¿estáis de alquiler o el local es vuestro? ¿Supone uno de los grandes gastos a mantener aunque no haya actividad?
Estamos en alquiler y es un 30% del presupuesto. Se cree que el Gobierno está estudiando un decreto ley para el tema de los alquileres, por supuesto de la vivienda, mucho más urgente, pero también de los locales comerciales, si no habrá que intentar negociar con los propietarios.
¿Cuáles creéis que van a ser para vosotros las repercusiones a largo plazo de esta crisis del COVID-19? ¿De qué forma lo vais a sufrir de cara al futuro?
Esa es una de las cuestiones que también estamos estudiando, cómo una vez que se pueda abrir vamos a traer de nuevo a la gente de forma inmediata, campañas intensas de publicidad en connivencia con las administraciones, campañas de descuentos e invitaciones…..
Se está hablando mucho de las medidas que ha tomado el Gobierno. ¿Crees que son suficientes para la cultura a nivel general y para vosotros en particular?
Dependemos mucho de las administraciones locales con las que MACOMAD, que agrupa a un buen número de salas, está en estrecho contacto pero también con el ministerio. Como decía antes les ha cogido desprevenidos y están tomando medidas sobre la marcha, creo que las que están tomando no están tomadas a la ligera pero han de ir avanzando, el problema es que la velocidad e intensidad con la que el COVID-19 se propaga no da mucho tiempo para meditar, hay que hacerlo bien y rápido y eso es complicado.
¿Qué necesitáis vosotros particularmente de las instituciones en un momento así?
Evidentemente respaldo económico inmediato como primera medida, y posteriormente un estudio a largo tiempo de apoyo pues las secuelas van a ser brutales en todos los campos, también en el nuestro.
¿Tenéis concedida alguna ayuda pública reciente? Si es que sí, ¿tenéis ya el dinero o todavía no? ¿Os han dado las instituciones alguna previsión en este sentido?
Las ayudas públicas de 2019 están abonadas excepto una, el problema es que se estaban convocando las de 2020 cuando apareció este ‘bicho’, de hecho la Comunidad de Madrid había convocado dos ayudas que LAGRADA había solicitado, pero los plazos de requerimientos y respuesta a dichos requerimientos se van a dilatar y esto afecta a las concesiones, aceptaciones y como no al abono de las ayudas, eso es lo que estamos negociando con las administraciones.
Para atacar a este sector siempre se habla de que la cultura está muy subvencionada, pero llega una situación como esta o una crisis económica y vemos que es un sector que sufre mucho y en casi todos los niveles. ¿Por qué la sociedad no reconoce al sector como debería? ¿Por qué siempre le dan de lado?
Un materialismo y pragmatismo exacerbado que se potencia desde los poderes económicos, que son los que imponen su ley; sólo se persigue una rentabilidad económica inmediata, sin mirar las consecuencias medioambientales y sociales, lo demás está de más. Esto es lo que los políticos deberían denunciar, esto es lo que los artistas debemos denunciar.
Vosotros sois también escuela. ¿Cómo os ha afectado ahora y cómo os afectará de cara al futuro?
También hemos tenido que suspender el curso y creemos que es un curso perdido, estamos pensando en el curso 2020-2021
¿Cuántos cursos (talleres, laboratorios, etc.) habéis tenido que parar y a cuántos alumnos y trabajadores ha afectado?
El grueso es la asignatura de interpretación, teníamos dos grupos de tarde y uno de mañana más un Taller con visos a estrenar en Julio, pero intuyo que tendremos que posponerlo.
¿Cuántos ya organizados no van a poder empezar?
A la altura que estábamos no íbamos a abrir ningún otro grupo, esperamos que los que ya había continúen en el próximo curso, lo que vamos a intentar es organizar algún intensivo de verano que sirva de escaparate para nuestra escuela.
¿Qué impacto económico creéis que supondría para vosotros no poder reanudar actividad hasta septiembre?
Brutal, nos avocaría al cierre si no se asume el problema por parte de las administraciones y de otros poderes, bancos, inmobiliarias; es necesario que apenque en mayor medida aquel que tiene qué aportar, por otro lado la sociedad rescató con su dinero a las entidades financieras en quiebra, tiene que haber reciprocidad.
¿Cuándo solíais lanzar convocatoria para los cursos de la siguiente temporada? ¿Creéis que esta situación retrasará también esos plazos y puede provocar perdida de futuros alumnos aunque la situación ya se haya solucionado?
Septiembre es el mes de lanzamiento y esperemos que este año se pueda respetar ese plazo, pero el mayor problema es que la gente va a tener menos poder adquisitivo y va a tener que destinar sus energías a solventar problemas más básicos, no es que no tenga interés es que lo va a tener muy complicado.
¿También podría afectaros el retraso de la EvAU y finalización de los cursos lectivos de Institutos y Universidades a la hora de que los posibles nuevos alumnos puedan plantearse apuntarse a vuestra oferta formativa?
Sí, va a ser un hándicap añadido a lo comentado anteriormente.
¿Tenéis formación online? ¿Creéis que puede ser una salida? Si no la tenéis, ¿Os lo estáis planteando?
Quizás algunas teóricas, pero no me veo dando interpretación ‘on line’, en todo caso clases presenciales divulgadas por streaming o You Tube… en fin.