Cargando...Comerse la cabeza será deporte olímpico en los próximos veinte años. Dentro de 30 quizás sea lo único que sepa hacer el Ser Humano. Esta inquietud y la curiosidad de por qué se hacía la vida más difícil a sí mismo fue lo que llevó a Dani Aparicio a crear Paradiso.
Según los principios budistas el paraíso es afrontar la realidad tal como viene. Las cosas que ocurren no son buenas o malas, son lo que hay y rumiarlas sin parar es lo que hace posible que el infierno aparezca en cualquier lugar. Comerse la cabeza es un mal hábito, no una manera de encontrar soluciones.
Tener nuestra opinión sobre lo que ocurre, retransmitiendo el minuto a minuto, no nos lleva a ningún lado que no sea sufrir por no poder cambiar algo que ya es.
El paraíso está en ser capaz de estar en paz con uno mismo y con nuestras circunstancias y no dejar que se nos lleven los ángeles o los demonios porque lo único que existe es lo que está aquí y ahora.
Dani Aparicio lleva su espectáculo de comedia a Madrid con un viaje por sus comidas de cabeza e idas de olla, reforzado todo por las ganas de entenderse un poco mejor a uno mismo y al mundo que nos rodea.
