Un cadáver exquisito
En pleno invierno suizo, dos hombres, uno de ellos polaco y el otro búlgaro, roban el cadáver del actor Charlie Chaplin para pedir un rescate a su viuda. Ella, Oona Chaplin, les asegura que no les va a dar nada por el ataúd ya que, aunque lo amaba, su cadáver no le va a traer de nuevo a su marido. Ellos intentarán por varios medios que Oona les dé dinero.