Del 18 al 23 de mayo, Teatro de los Invisibles ha desarrollado una residencia artística virtual para dar forma a la primera fase de su nueva creación: Proyecto Habitantes, que constará de dos piezas independientes: 2020: Antifuturo, una película poética creada en el marco del confinamiento, y Habitantes, una pieza teatral, ya en proceso, que se estrenará cuando la situación sanitaria lo permita.
Por Teatro de los Invisibles
Con el inicio del confinamiento, impuesto por la emergencia sanitaria, desde Teatro de los Invisibles nos vimos en la obligación de paralizar nuestra actividad justo cuando comenzaba la fase de creación de nuestra nueva pieza de teatro documental Habitantes, al ser inviable la reunión de las personas que conformamos el equipo.
Ante la imposibilidad de desarrollar la obra, decidimos no abandonar nuestras ganas de crear y tomamos la decisión de desarrollar un proyecto paralelo al que hemos bautizado como 2020: Antifuturo, una película poética, que nace en el confinamiento y que tendrá como singularidad su carácter inmersivo, destinada para que el espectador la visione de forma individual con el objetivo de compartir un momento de intimidad entre intérpretes y receptor. Para llevar a cabo este metraje hemos desarrollado una residencia virtual de una semana para generar material y una puesta en común de ideas con cuatro semanas previas de investigación individual. Una vez terminada esta residencia, el proyecto entra en una nueva fase de recopilación y desarrollo.
El inicio de una nueva década siempre da pie a mirar hacia el futuro con optimismo, es un momento especial en el que la palabra “cambio” suena aún con más fuerza en nuestra mente. 2020 prometía no solo no ser un año cualquiera sino que para muchas personas iba a ser “el año de nuestras vidas”, el que iba a marcar un antes y un después, un punto de inflexión.
Pero esos puntos de inflexión no siempre llegan de forma amable, de repente llega un nuevo virus que pone en jaque nuestro estilo de vida, nuestra manera de enfrentarnos al mundo, de establecer relaciones con la cotidianidad y nos hace confinarnos en nuestras casas y nos hace parar, parar absolutamente todo y nos hace cuestionarnos nuestra forma de existir.
¿Por qué no puedo parar de producir? ¿Por qué no puedo parar de consumir? ¿Por qué mi cuerpo sigue yendo acelerado cuando el tiempo se ha parado? ¿Soy peor que el resto si asumo que me aburro? ¿Cómo asumo la cotidianidad de la no cotidianidad? ¿Qué pasará el día que termine todo esto? ¿Podré regresar a una normalidad que quizás no era tan normal? ¿Podré seguir viviendo dentro de un sistema obsoleto?
Investigación
Nuestra investigación se ha basado en la indagación introspectiva de cada uno de los y las miembros de la compañía. Es decir, desde las reflexiones más superficiales que nos inundan en este confinamiento hemos ido excavando hacia pensamientos más profundos que nos han hecho llegar hasta nuestro “yo” más primario. Llegar a ese punto era necesario para conseguir liberar nuestro pensamiento mágico. Como si se tratase de un delirio, el objetivo es crear entre todos y todas una experiencia artística, que suponga en su totalidad un viaje para el que lo está viendo.
Durante la investigación nos dimos cuenta de que una de las palabras clave de este proyecto será «Incertidumbre», por ello pensamos en las cartas del tarot como un elemento de puesta en escena que intente dar respuesta al «¿Qué pasará conmigo?»