
Life is a Dream
Ocho actores en un escenario austero, como un eco de la precariedad impuesta en un país en guerra.

Ocho actores en un escenario austero, como un eco de la precariedad impuesta en un país en guerra.

Vuelve a los escenarios este hito del teatro colombiano que marcó un antes y un después en la dramaturgia contemporánea de aquel país por su manera aguda y provocadora de abordar las heridas de la guerra.

Los personajes son liberados e intentan rehacer sus vidas, enfrentados a la barrera de sus antecedentes penales.

¿Qué nos encontramos en esta mirada teatral que traslada el terror social de las historias de Enriquez a un único escenario, donde lo siniestro emerge de lo cotidiano?

Una obra que plantea una crítica mordaz a los sistemas que, bajo el disfraz de la armonía, sostienen la exclusión, el control y la represión.

La pieza se levanta como una misa pagana que invoca un cielo travesti.



Un intenso drama que explora la complejidad de las relaciones humanas.

Un retrato sincero, humano y a ratos con humor, sobre el peso de la soledad, los giros de la vida y la importancia de sentirse escuchado.

Una cita imprescindible para los amantes del teatro comprometido, la memoria histórica y la obra lorquiana.
