La compañía OGMIA, liderada por el director y coreógrafo Eduardo Vallejo Pinto (Mieres, Asturias, 1991), emprende durante los meses de mayo y junio gira con tres de sus espectáculos: Glass House, Undergrowth y Mother Tongue. Eduardo Vallejo Pinto ha desarrollado su carrera profesional en danza clásica y contemporánea, aunque su proyecto creativo bebe de varios lenguajes: desde las artes marciales a la fotografía, pasando por el cine y los videojuegos. Todas sus producciones tienen un lenguaje inconfundible: el trabajo con un elenco internacional, integrado por bailarines de diferentes culturas y nacionalidades y la recurrencia a mundos de fantasía oscura o pseudofuturista para construir un relato crítico sobre el presente. Lo documental y lo autobiográfico se entrelazan en sus creaciones enmarcadas en universos ficticios, llenos de misterio y profundidad. La vida se cuela en escena protagonizada por una generación joven que se reivindica como motor de transformación y que se involucra, desde lo dancístico, en temas como el cambio climático, la desigualdad social, la crisis política o la comunidad LGTBIQ+.
Con Glass House, que podrá verse el 24 de mayo en el Festival Internacional Madrid en Danza (Teatro Municipal Francisco Rabal, Pinto), el 1 de junio en el Teatro del Bosque de Móstoles y el 21 de junio en MADferia, presenta una utopía perversa protagonizada por siete bailarines de distintas nacionalidades. La pieza abre la puerta a una catarsis ritual en la que el individuo, como parte de una sociedad alienante, tratará de salvarse de sí mismo. Formando parte de esta pulsión colectiva busca aprender, como si de los pilares de una casa se tratara, que cada ser es una pieza indispensable para esta construcción social.
El espectáculo Undergrowth, creado en colaboración con el Staatsballet de Hannover e interpretado por bailarines del Institut del Teatre, llega el 14 de junio al Teatre Ovidi Montllor de Barcelona. Por último, Mother Tongue, una de las creaciones emblemáticas de OGMIA, se presentará los días 28 y 29 de junio en el festival Danza en la Villa en Madrid. En Mother Tongue Eduardo Vallejo Pinto indaga, a partir de su propia experiencia y la de sus bailarines, sobre el «movimiento dactilar», una teoría que asume que el movimiento de cada intérprete es una forma de expresión única, como una huella dactilar, que constituye una identidad narrativa personal. Mother Tongue transmite también el desarraigo que sentimos al volver a nuestros orígenes, un reencuentro en el que llegamos a sentir “nuestra tierra” como algo ajeno y reconocible.
OGMIA/ Eduardo Vallejo Pinto
Eduardo Vallejo Pinto funda su compañía, OGMIA, en el año 2019. Su primera producción, No Time to Rage, es nominada en cuatro categorías en los Premios Max: mejor espectáculo de danza, mejor coreografía, mejor intérprete de danza y mejor composición musical. A este reconocimiento le siguen muchos otros, convirtiendo OGMIA en uno de los referentes de la nueva danza contemporánea en Europa.
Con OGMIA ha subido a escena los siguientes espectáculos: No Time to Rage (2019), llegan las piezas The Holy Trinity (2020), Doppelgänger (2020), Time X (2021), Mother Tongue (2022), Glass House (2023) y Replicant (2024).
Ha recibido apoyos y residencias de importantes instituciones como la Compañía Nacional de Danza, Centro Coreográfico Canal, Teatros del Canal, Teatro del Bosque, INAEM, la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Madrid, entre otros. Sus piezas se han programado en espacios y festivales como Madrid en Danza, TANZ International Hannover, MASDANZA, Quincena de Danza de Almada, el Festiwal Teatr i Tanca Zawirowania, el Gdansk Festiwal Tanca, el Danza en la Villa, Danza Xixón, el Festival Abril en Danza, Traslación, entre otros muchos. Sus creaciones han girado en España, Alemania, Polonia, Portugal y Suiza.
La compañía desarrolla también una importante labor docente. Eduardo Vallejo Pinto ha impartido clases en diversas instituciones como la John Moore Liverpool University / Institute of the Arts en Barcelona, la Joven Compañía, la Jove Companhia de Dansa Gerard Collins, Elephant in the Black Box, el Conservatorio Superior de Alicante, el Conservatorio Profesional José Espadero y el Proyecto Good con el apoyo del Institut Valencia, Espai la Granja y L’Escorxador, Danza 180, Modern Event & Work Lab, entre otros.