“Todos buscan el amor, todos van a tener una primera cita, ¿qué puede salir mal?”
Los Teatros Luchana estrenan Conectad@s -a partir del 10 de febrero-. Una obra escrita por José Ignacio Tofé y dirigida por Víctor Páez; con Bertus, Gakian, Iosu Martínez, Natalia G. Santamaría, Chim y Celia Castle formando el elenco.
Desde Godot, hablamos con estos últimos para descubrir más sobre la pieza y que nos actualicen el estado de la serie que están poniendo en marcha: De Madrid al suelo.
Creando contenido en Internet desde hace varios años, Chim y Celia nos demuestran que con pasión, ganas y trabajo todo es posible.
El amor en tiempos de Tinder
Por Javier López
Foto de portada: Lalo Deho
Esta obra plantea a seis personas que buscarán cambiar su vida amorosa a través de una aplicación para conocer gente, pero ¿qué es para vosotros Conectad@s?
Celia Castle: El tema principal es ver cómo se relacionan personas que tienen personalidades muy distintas a una misma situación. Todos van a tener primeras citas entre sí. Se verá cómo cada uno tiene una idea del amor romántico o las aspiraciones que tienen en su vida respecto a eso. Se muestra la evolución de cada personaje y lo que aporta cada uno de ellos dentro de su desarrollo personal.
Chim: Conectad@s es como si fuera un cóctel molotov de gente peculiar que te puedes encontrar en Tinder, en otras redes sociales, en la universidad o en cualquier parte. Se ve cómo esos perfiles se juntan en primeras citas y cómo interaccionan entre sí… con sus traumas o cosas que arrastran que acaban explotando con otra persona en un tono siempre cómico, pero es esa risa que te entra porque sabes que lo has vivido y es bastante jodido. De hecho, lo que va conduciendo toda la obra es: ¿esto es una comedia o un drama? Porque si es un drama y te estás riendo…ahí está el punto.
¿Quiénes son vuestros personajes y cómo los definiríais?
Celia Castle: Mi personaje se llama Marta y es una chica un poco peculiar. Así, de primeras, parece un poco repelente porque su personalidad es un poco cortante y siempre está diciendo a los demás qué hacer para arreglar su vida. La evolución a lo largo de la obra muestra cómo el problema es suyo y no es algo ajeno.
Chim: Iván es un tío desenfadado, parece el típico amigo hetero de una persona gay, que es abierto de mente, pero tampoco tanto, ¿sabes? (Risas) Está completamente atascado en su exnovia, no avanza de ahí, se siente como una mierda y está cerca de entrar en depresión y lo que él quiere es encontrar a esa persona que sustituya la relación que ha tenido antes. A lo largo de la obra descubrirá que igual no necesita a otra persona, o igual sí… Tendrá un viaje en el que intente superar esa ruptura y quererse a sí mismo.
¿En qué se parecen a vosotros?
Celia Castle: A nivel externo, Marta se dedica, casualmente, a las redes sociales, pero realmente es todo lo contrario a mí. Lo guay de la obra es que puedes ver en cada personaje cosas tuyas. Yo creo que la gente va a empatizar con todos.
Chim: Y es guay porque al principio el tuyo es muy repelente.
Celia Castle: Sí, pasa muchas veces. Que conoces a alguien que tiene una coraza y luego cuando vas quitando capas, descubres lo que hay en realidad.
Chim: Yo soy muy distinto a Iván. Es muy pesimista, evocado al pasado y yo no pienso mucho en el pasado. Pero sí que encuentro tendencias en quedarte atascado y no pasar página, o lo que ha pasado antes esperar que vuelva en el futuro.
¿Se toca entonces la idea del amor romántico?
Celia Castle: Sí, quisimos tratarlo desde el principio. Se habla en algún momento del mito de la media naranja y se le da la vuelta y eso es guay, porque a mí personalmente, me parecía peligroso perpetuar la idea de que somos mitades y no estamos completos hasta que tenemos a otra persona. En la obra no todo el mundo acaba con todo el mundo…cada uno tiene su viaje personal y el fin no es encontrar el amor sino estar estable contigo mismo. También hay que tener en cuenta que esto es una comedia y no hay ningún tipo de reivindicación política, social ni nada…Vas a reírte, pero el mensaje te lo puedes llevar igualmente.
¿A qué tipo de público está dirigida la obra?
Celia Castle: Yo te diría que puede ser bastante amplio, desde adolescentes que se están adentrando en sus primeras citas, hasta gente de la edad de mí tía, por ejemplo, que con treinta y cinco años está con Tinder. Es verdad que es un lenguaje un poco más millenial y muchas bromas son para gente de veinte o veinticinco años que tenemos una jerga muy concreta.
Chim: Hay chistes para personas de treinta y cinco o cuarenta y para gente más pequeña.
Celia Castle: Tampoco está solamente destinada a un público que consuma este tipo de aplicaciones. Yo, por ejemplo, no he quedado nunca con nadie de Tinder, pero empatizo con muchas cosas, no por la situación, sino por la persona en sí. Es algo más genérico.
Es vuestra primera vez encima de las tablas de manera profesional ¿Cómo está siendo la experiencia?
Celia Castle: Yo estoy muy nerviosa, pero desde el primer momento me lo he tomado como un reto personal. A mi desde siempre me ha gustado la interpretación y también me toca muy de cerca por mi ámbito profesional… el audiovisual en general, y más aquí, en Madrid, que me he movido siempre por esos círculos. Creo que es un mundo muy bonito para conocerte a ti mismo y tengo muchas ganas. Espero que a la gente le guste…
Chim: Lo hace muy bien, a mí me gusta mucho (risas). Yo no lo sé… a día 4 de febrero de 2022 aún no nos hemos subido a los Luchana y todavía no hemos experimentado la sensación de estar en el escenario.
Celia Castle: Nuestro ‘problema’ es que empezamos fuerte, la gente se apunta a teatro en la escuela o en su pueblo y va poco a poco… Nosotros, de primeras, ahí: en la sala grande de los Luchana.
¿Os encontráis a gusto haciendo comedia?
Chim: Cuando hicimos el casting yo pensé que como había hecho ya comedia en Disney creí que iba a ser parecido y, evidentemente no tiene nada que ver grabar en la tele a hacer teatro. Sí es cierto que estoy cómodo en comedia, si me hubiera metido a hacer drama o algo clásico estaría muy cagado.
Celia Castle: Yo, al revés. Para mí la comedia es totalmente lo contario a lo que hago en mi vida. Chim, tú a aparte de haber hecho televisión de comedia, has hecho videos de comedia en tus principios en el canal, pero yo absolutamente nada.
Para ti, Celia, es un doble reto personal.
Celia Castle: Claro, porque lo que he hecho en mis redes sociales tiende al drama siempre. De hecho, el director me lo dice mucho… que tiendo al drama. Además, otros dos compañeros nuestros que tampoco tienen experiencia actoral – los otros dos sí la tienen – sus trabajos están muy relacionados con la comedia…
Chim: Justo nuestros dos personajes son los menos cómicos porque tienen un ‘background’ un poco oscuro, pero está muy bien porque puedes jugar a llevártelos a la comedia o al drama, así que tenemos esa oportunidad de viajar un poco de género.
¿Cómo está siendo el proceso de ensayos con el director y vuestros compañeros?
Celia Castle: Pues llevamos ensayando desde octubre hasta ahora… bastante tiempo porque se ha tenido en cuenta que nosotros no teníamos experiencia actoral, entonces los primeros meses han sido clases de interpretación y luego ya nos hemos metido con trabajo de personajes y texto. Yo lo he disfrutado mucho, pero al mismo tiempo ha sido un proceso complicado a nivel personal porque me ha entrado mucho síndrome del impostor. Ahora ya estoy mucho más tranquila porque el trabajo ya está hecho, pero mientras lo estás haciendo es jodido, sobre todo, porque mis compañeros son los putos amos y yo estaba fuera de mi zona de confort.
Chim: Yo he disfrutado mucho de los ensayos, mira que yo vivo muy al norte de Madrid, y los ensayos eran muy al sur. Me hacía una hora y cuarto de ida y vuelta todos los días y lo hacía gustoso. Creo que hemos hecho muy buen ‘team’ los seis y estoy muy contento.
¿Qué es lo más catastrófico que os ha pasado en una primera cita?
Chim: Yo quedé con una pareja para conocernos. Una chica y un chico. De repente, cuando llegamos, ella se parecía mucho a la de las fotos, pero él no. Y después de un rato, dice la chica: “Bueno, me marcho que tengo muchísima prisa”. Cogió, se fue y me quedé solo con el chico. Al poco, me confesó que no era su novia, era su amiga. Así que la cita se truncó. Me tomé una cerveza y me fui a mi casa.
Celia Castle: Yo te diría una que no fue desastrosa, pero es que no hubo nada de ‘feeling’…. fue aquí en Madrid y fuimos al parque de atracciones. Nunca había estado, y fue un poco raro para una primera cita, pero bueno, al final destensas todo en las montañas rusas.
“Queremos preestrenar el piloto de De Madrid al suelo en esta primera mitad del año”
Habéis rodado hace poco el piloto de la serie De Madrid al suelo con un gran equipo. ¿Cuándo podremos verlo?
Celia Castle: No tenemos ni idea. Tuvimos un problema hace unos meses y el futuro del proyecto cambió por completo. En un principio se iba a emitir la serie entera en abierto en Internet y ahora mismo es incierto, porque solo tenemos el piloto y pretendemos moverlo a ver si podemos venderlo o producirlo de alguna manera. Sí que queremos proyectar el primer capítulo para las personas que participaron en el crowdfunding.
Chim: Nos dio mucha rabia porque era una lucha de orgullo y decir: “Vamos a sacarlo abierto para todo el mundo y públicamente porque esto ha salido de un crowdfunding y es lo justo”, pero que hemos hecho un gran trabajo, y ha quedado guay. El evento del preestreno va a estar chulo. Queremos que sea en esta primera mitad de año.
Conseguisteis lanzaros a rodar gracias a una campaña de crowdfunding que funcionó muy bien. ¿Cómo fue la experiencia?
Celia Castle: Fue mucho trabajo a un nivel extremo. Empezamos a escribir la serie en octubre de 2020 y desde enero hasta marzo de 2021 estuvimos preparando el crowdfunding Nuestro problema era que queríamos grabar un teaser y eso ya fue un circo en sí mismo. Además, había que hacer todo el diseño de la página, planificar las recompensas, e hicimos una campaña de marketing y publicidad muy grande. A veces pensábamos que no lo íbamos a conseguir, porque dieciséis mil euros era muchísimo dinero y en redes tenemos alcance, pero no tanto como para juntar a tanta gente que aporte. En un directo de Instagram que hice cuando nos faltaban casi cuatro mil euros, se juntaron ochocientas personas y todas metieron dinero hasta que lo conseguimos. Nunca me hubiese esperado eso porque a mí me puede seguir mucha gente, pero que toda esa gente esté dispuesta a pagar por algo que no ha visto aún… es muy fuerte.
Chim: Todas las personas que creamos el proyecto no creo que seamos muy de estar pendientes de los números a nivel seguidores, tenemos otra filosofía, pero con el crowdfunding te obligabas a estar pendiente de los números, porque decías: me están separando de cumplir un sueño en mi vida cinco mil euros. Además, con el crowdfunding es o todo o nada. O consigues el objetivo que has propuesto o no te llevas ni un euro.
Tenéis una herramienta poderosa de influencia ahora mismo sobre gente que quizá se quiera dedicar al audiovisual. Con vuestra experiencia ¿qué les diríais?
Celia Castle: A mí, mucha gente me pide consejo porque ven mis vídeos y quieren saber mi experiencia estudiando comunicación audiovisual. Yo lo que me diría en su momento, cuando tenía quince años y me quería dedicar a esto, era que aprovechase todas las oportunidades que se me pasen por delante para trabajar. En este ambiente hay veces que se tiende a individualizar mucho, pero si tienes la oportunidad de formarte en esto, tienes que juntarte para hacer cosas y moverte porque al final el audiovisual es un trabajo conjunto.
Chim: Yo no suelo pensar en la influencia que tenga lo que podamos hacer… sí que hay que veces que alguien nos para y nos dice: “Oye, me has inspirado mucho para hacer esto, o lo otro…”, pero yo no pienso que en mi día a día sea referente para nadie… cada persona es un mundo. No me gustan los discursos de luchar por tus sueños, pero creo que cuando a ti te gusta crear cosas significa que tienes un nervio dentro y da igual las adversidades que te encuentres porque va a acabar saliendo por algún sitio. Si la persona que nos está leyendo tiene ese nervio dentro y se encuentra con muchísimos obstáculos y aun así sigue con él, creo que significa algo.
“Las redes sociales son un medio y no un fin”
Los dos lleváis trabajando en redes desde hace mucho tiempo y eso hace que ahora tengáis un escaparate potente de cara a todos vuestros proyectos. ¿Cómo os ha ayudado en el mundo profesional dedicaros a Internet y a la creación de contenido?
Celia Castle: Ahora mismo yo no estoy trabajando activamente en el mundo audiovisual, pero el día de mañana, cuando acabe la carrera y vaya a cualquier sitio, va a beneficiar que yo lleve haciendo vídeos diez años. En el audiovisual, marketing o redes, cualquier cosa… Es currículum y porfolio, al fin y al cabo.
Chim: Por 2016, más o menos, yo estaba muy centrado en YouTube y entonces tuve claro que las redes eran un medio y no un fin. Siempre he continuado haciendo vídeos en YouTube, pero teniendo en mente que las redes son una catapulta que te lleva a distintos puntos.
¿Cómo lleváis ciertos comentarios que os relacionan con el intrusismo laboral?
Chim: Obviamente yo no habría trabajado en la tele o en teatro sin mi canal de YouTube. Pero ¿qué hago? ¿Lo desaprovecho por el ‘qué dirán’ o el intrusismo laboral? Pues si me salen estas oportunidades, sinceramente, las quiero aprovechar porque me hacen muchísima ilusión. Ahora, por ejemplo, ensayar Conectad@s me ha dado muchas ganas de formarme en interpretación y quiero seguir en ello. Además, que creadores de contenido escriban libros o hagan teatro es una oportunidad muchas veces para que la gente más joven se interese por esto.
Celia Castle: Y que un producto sea de creadores de contenido no quiere decir que sea malo. No somos un ente, hay personas y personas, como en todas las profesiones.
¿Hay alguna línea profesional por la que queráis centraros en un futuro sí o sí? ¿O preferís ir probando?
Celia Castle: Yo estoy en cuarto de carrera, no lo sé. Cuando acabe en junio, seguramente me marche una temporada e intentaré separarme un poco del mundo laboral. Después, cuando vuelva, ya veré.
Chim: Yo soy un poco hombre orquesta y siempre me apetecen muchas cosas. Ahora me está dando mucho por escribir porque acabo de sacar mi primera novela y estoy un poco en la narrativa de que escribir es menos ‘complicado’ que levantar un rodaje, pero como digo, me está gustando mucho también la interpretación. No lo sé. La respuesta que te pueda dar ahora será distinta a la que te pueda dar dentro de seis meses.
Si no os hubieseis dedicado a Internet y a la creación de contenido, ¿por dónde hubierais enfocado vuestro futuro?
Celia Castle: Yo hubiera estudiado psicología o derecho. Me hubiera gustado mucho y no lo descarto todavía.
Chim: Yo sería profesor. Al igual que me levanto por la mañana y me apetece escribir un libro, otros días me apetece mucho ser profesor. Supongo que acabaré siéndolo en algún momento.