Galeguiña, de madre canadiense y con nombre de princesa Disney. Ser riquiña lo llevo en el ADN y en el DNI. La retranca, la llevo por supervivencia.
Yo lo que no quiero, bajo ningún concepto es molestar a nadie. Bueno, depende. O sí. Porque todos llevamos un hater escondido dentro. Y yo, a la mía, cuando aparece, como soy riquiña, lo único que puedo hacer es… Abrazarla.