Sofía trabaja como tanatoesteticista en la funeraria familiar Bendita Luz.
Una tarde, un difunto un tanto especial, pone su percepción del amor patas arriba.
Dicen del Amor que está en el aire, que siempre hay un roto para un descosido y que llega cuando menos te lo esperas. O si no, que se lo digan a Sofía.