Fotos: David Ruano
Una de las obras fundamentales de la narrativa sudamericana del siglo XX, una historia de historias donde ternura y violencia se combinan para denunciar el abuso de los oprimidos y la corrupción.
Un hombre humilde, Pedro Páramo, llega a convertirse en el cacique de su pueblo, Comala, una pequeña localidad que él exprimirá y arrasará hasta convertirla en un pueblo fantasma. Hasta allí llegará, años después, su hijo, Juan Preciado, que volverá al pueblo, se cruzará con los fantasmas de quienes vivieron allí y descubrirá así quién era realmente su padre y cómo se aprovechó de los habitantes del pueblecito, incluyendo su madre. Es una historia sobre la corrupción que nos habla de los mecanismos del poder y de cómo se utilizan en todo el mundo para el propio provecho a partir de unos hechos que transcurren en una pequeña comunidad . La historia del padre, el hombre más importante y corrupto de Comala, y la de su hijo, que llega a la población cuando ya está desierta y solo se pasean por las calles las almas de quienes vivieron allí, se alternan en una estructura laberíntica.
Ha creado la dramaturgia Pau Miró, un director y dramaturgo formado en el Institut del Teatre y la Sala Beckett que ya en 2015 se enfrentó al texto, dirigiendo una dramaturgia propia que tituló Comala y que se vio en el Almeria Teatre.
Dirige la puesta en escena, interpretada por Pablo Derqui y Vicky Peña, un gran nombre de la escena, Mario Gas, un actor, autor y director de teatro y ópera que ha firmado más de un centenar de montajes, ha recibido los galardones más prestigiosos, entre ellos, el premio Butaca, el premio Nacional de Teatro, varios premios Max y un Ciutat de Barcelona en la modalidad de Artes Escénicas, y que está vinculado de una forma especialmente estrecha a la historia del Grec Festival de Barcelona, donde ha dirigido óperas, montajes teatrales y musicales.