Esta es la clásica historia de cuatro jóvenes muy frescos que, seducidos por la noche, acaban perdidos, desnudos y muy -pero que muy- confundidos en un bosque mágico habitado por dioses del Olimpo, hadas coreanas y un fauno muy cachondo que acabará liándola muy parda. Y todo esto acompañado de baladas pegadizas, pop ochentero y, por qué no, sevillanas. Lo dicho, un clásico.
Otro sueño de una noche de verano coge la obra de Shakespeare, lo despedaza sin piedad (y con cariño) y lo convierte en una atrevida y provocadora orgía de comedia, fantasía y frescura, mucha frescura.