Foto: Stephan Vanfleteren
En 1999, Viviane De Muynck y Jan Lauwers se pusieron manos a la obra para abordar la escritura de James Joyce. Tras varias cartas ofensivas y desafortunadas, el nieto del escritor, Stephen J. Joyce, les prohibió expresamentamente utilizar el material. Pese a esta prohibición, en Alemania se realizaron algunas lecturas clandestinas que fueron documentadas por la prensa. Ahora que los derechos de autor de Joyce han expirado, los creadores han podido finalmente sacar a escena libremente esta pieza.
Molly Bloom presenta el monólogo interior de la esposa infiel de Leopold Bloom. Molly Bloom emerge como un símbolo de la feminidad, desvela sus pensamientos sobre los hombres de su vida, su situación actual, sus recuerdos, su sentido del humor, su entusiasmo vital y cómo afronta la pérdida y el arrepentimiento.
Para la actriz Viviane De Muynck y el director Jan Lauwers, el teatro es una cuestión de vida o muerte. Su primer encuentro se dio en la obra Isabella’s Room, que pudo verse en el Festival de Otoño en 2009. Ambos artistas comparten la misma pasión por James Joyce, a cuyo trabajo ya se habían acercado en el espectáculo La Poursuite du vent. En esta ocasión, han indagado en lo más profundo del Ulises, uno de los texto literarios más importante del siglo XX. Y, más concretamente, De Muynck y Lawers han querido abordar uno de los capítulos más controvertidos y jugosos del libro: el monólogo de Molly Bloom.
He aquí una inmersión impresionante, a veces, incluso, escandalosa, en el universo interior de una mujer que revela todo sobre su vida íntima, sexual, ya sea real o fantaseada. Molly es una esposa infiel. Una heroína sin filtro ni tabú, que cierra la monumental ficción de Joyce con su alocado discurso. Para encarnarla, es necesaria una actriz, literalmente, extraordinaria. Y así es Viviane De Muynck, a quien Jan Lauwers dirige con la exigencia y la precisión de un violinista apasionado.