Acto escénico que reflexiona sobre la inspiración.
El cuerpo como vehículo de las vivencias que hacen a los interpretes protagonistas de una dramaturgia construida, aprendida y habitada. ¿La inspiración se puede provocar?
Las musas son ese destello que ilumina la oscuridad, una conexión espiritual donde la meditación libre adquiere forma y responde preguntas que quizás ni me estoy haciendo.
El destello surge en un momento, es fugaz, efímero y puede confundirse si no estamos atentos.
La energía fluye a través nuestro, somos nosotros los que tenemos que estar atentos y dar forma.
Hacer y no hablar de hacer.
La inspiración, la creación, el amor, la vida necesitan de tiempo, son tiempo.