Dos extraños se encuentran un domingo por la tarde en Central Park, Nueva York. Peter es un hombre casado que trabaja en una pequeña casa editorial y Jerry es un hombre solitario que acaba de regresar del zoológico. Este encuentro desafiará sus percepciones sobre el amor, el fracaso, y la importancia de conectarse con alguien o algo a cualquier costo. El misterio de lo que sucedió en el zoológico se convierte en un desenlace inesperado.
Obra simple y a la vez muy enigmática, trata de la enorme dificultad de comunicación entre los seres humanos. Solamente hay dos personajes y la obra es en esencia un monólogo que recuerda a la desoladora dramaturgia de Ionesco y Beckett: no se intenta en ningún momento moralizar, como ocurre en general con todo el teatro de Albee.