Estamos a principios de la década de 1930, en la República de Weimar. La Gran Depresión no muestra piedad y la sombra del fascismo se ensancha y oscurece cualquier atisbo de esperanza. En esta época de caos e incertidumbre, Ella Gericke, enviuda después de un año y medio de matrimonio. Sin trabajo ni sustento, decide adoptar la identidad de su marido, Max Gericke, y reemplazarlo en la fábrica como operador de toro mecánico.
Así, disfrazada de hombre, vivirá los años del ascenso al poder de Hitler y los desastres de la guerra. El fin del conflicto bélico alivia ciertas dificultades, pero no la libera del paro ni del hambre, y menos de la soledad. Ella / Max Gericke recuerda algunos momentos de su viaje, evocando al mismo tiempo un período doloroso de la historia alemana/europea.