Verónica y Andrés son propietarios de un pequeño piso de barrio obrero, en el que viven desde hace 12 años. Debajo de ellos vive Guzmán, un vecino que se dedica a hacer la vida imposible al resto de la comunidad. Cuando la rotura de una tubería en el baño de Verónica y Andrés inunda el piso de abajo, la pareja deberá enfrentarse a la pesadilla de convencer a Guzmán para que no les denuncie. Pero en estos locos años 20, la normalidad no existe, y los acontecimientos se precipitan de formas inesperadas.