El espectáculo, escrito y dirigido por José Sanchis Sinisterra, lanza preguntas que no esperan respuesta con la intención de rescatar del olvido a los vencidos de la Historia. Propone reescribir los acontecimientos oscuros de la Humanidad, avivando la imaginación colectiva y confiando en el futuro para no cometer los mismos errores.
¿Qué teatro hacer en este aciago siglo XXI? ¿Espectáculos de puro entretenimiento, que aumenten todavía más “la modorra política de nuestra sociedad consumista y cibermema”?
¿Obras de denuncia-políticamente-correcta, que ilustren la actualidad, ya tan aireada y cacareada por los medios de comunicación?
Una pareja de jóvenes actores se apresura por crear un espectáculo que se ajuste a sus aptitudes artísticas y a sus posibilidades económicas. Entrelazando el humor, lo fantástico y lo político, los protagonistas quieren crear un nuevo estilo teatral, un teatro de rabia que exponga la crítica social imperante en las calles. Un juego con una serie de enigmas que aspiran a suscitar otras tantas preguntas en la mente del espectador.
¿Es posible? ¿Puede el teatro usar sus poderes de evocación e invocación para reescribir la Historia, para reparar a los perdedores, para recuperar lo que pudo haber sido y no fue? El espectáculo no pretende responder a estas preguntas, pero si suscitarlas, junto con muchas otras, y dejarlas vagando.
Esta es la encrucijada en que se encuentran nuestros dos personajes, Rómulo y Patri, una pareja de jóvenes actores que, en un galpón casi abandonado, cedido al efecto por el tío Roque, se afanan por crear un espectáculo a la medida de sus aptitudes artísticas y de sus posibilidades económicas.
La vida misma, vamos…