Inventamos casi siempre futuros catastróficos en los que apenas se puede sobrevivir con la ayuda de la ciencia.
En Cero X nos encontramos con un futuro perfecto en el que todo lo problemático es solucionable, desde la enfermedad al cambio climático, incluso las discapacidades físicas lo son: los paralíticos caminan, los mutilados reciben nuevos miembros, se recambian los órganos deficientes y por supuesto no existe la ceguera.
En esta nueva sociedad el individuo está obligado por ley a subsanar sus defectos. Pero, ¿qué ocurre cuando alguien se niega a hacerlo?, ¿qué ocurre cuando alguien decide vivir según las circunstancias que le han tocado?
Este mundo distópico esconde un lado oscuro que como siempre o bien no nos permiten verlo o bien no queremos verlo. Y es que como ya sabemos, aparte de la ceguera física hay otro tipo de cegueras.