Agustín Durán regresa con Cazafantoches, la comedia que sembrará criterio y hará recapacitar a las mentes descarriadas. Un espectáculo en el que la música acompañará al humor, donde la improvisación y la participación del público jugarán un papel importante, y por supuesto se defenderán los valores de la vida rural y sus gentes.
En los últimos años Agustín Durán ha engordado unos 15 kilos, hay quien piensa que ha sido a base de comer panceta y no quitarle lo blanco al jamón… Pero no, lo que le hace bulto debajo de la camiseta es fruto de haber tragado mucho viendo comportamientos raros a su alrededor, bueno, y también un poco lo del jamón…
Él no entiende que haya jóvenes que lleven chanclas y unos calcetines subidos a la altura de las rodillas creyéndose modernos, eso era algo que ya hacía su abuelo cuando iba a bañarse al pantano hace 50 años. ¿Era acaso su abuelo un visionario? Tampoco entiende que haya personas que se corten el pelo sólo por los lados y se dejen lo de arriba largo, pero el peluquero les cobre como si les hubieran cortado la cabeza entera. ¿Cobra igual el que hace una zanja de 100 metros, que el que la hace de 50? No. ¿Por qué el peluquero sí?
Es hora de terminar con estos comportamientos e imponer cordura.
¡Atención, amantes del calcetín tobillero a diez grados bajo cero! ¿Es de modernos ir con los tobillos escarchados? ¡Atención, muchachas que se compran pantalones tan rotos que cuando se los ponen se ve más chicha que tela! ¡Atención a los que se hacen llamar “Hipsters” por tener unas barbas que les rozan el ombligo, cuando en realidad lo que queda claro es que son más perros que Snoopy!
No lo olvide, si ve algún Fantoche… Agustín Durán le creerá. ¿A quién vas a llamar?