“Tengo mi dinero en uno de los bancos más importantes de este país, que es un banco que especula con alimentos. Entre otras actividades. Hace unas semanas estuvimos cenando juntos un grupo de amigos y pasamos la velada hablando de las injusticias que están ocurriendo. Cuando trajeron la cuenta, cada uno sacó su tarjeta de algunos de los bancos más importantes de este país, que son bancos que especulan con alimentos, echan a la gente de sus casas o comercian con armas prohibidas. (…) Sé que vivo en una sociedad injusta hasta la crueldad. Y quiero que cambie. Pero no sé si estoy dispuesto a arriesgarme a perder en el intento todo lo que tengo. Quiero conservar mi fama, mi cotización comercial, mis propiedades. Estoy hablando en serio. Soy un joven capitalista español”.