«Organizar estos Encuentros es un impulso que no podemos evitar»
Hablamos con Ángel Málaga, Comisario de los I Encuentros Iberoamericanos Macomad, una interesante y necesaria iniciativa que propone cuatro jornadas de trabajo abiertas al público y dedicadas a la búsqueda de soluciones creativas en el mundo de las Artes Escénicas.
Mesas redondas, conferencias, piezas artísticas online y piezas escénicas en los teatros forman parte de la programación de esta primera edición que tendrá lugar en Nave 73 del 1 al 4 de diciembre de forma presencial y que se podrá seguir también por Zoom.
Las salas alternativas enfrentan los desafíos de la pandemia
Por Sergio Díaz
¿Qué es Macomad?
Macomad es la Coordinadora Madrileña de Salas Alternativas que lleva formalizada como Asociación Cultural desde el año 1993, con épocas de más actividad y otras con menos, pero a pleno rendimiento desde hace unos 10 años.
En el año 2015 pasa a llamarse Macomad, sin perder el apellido Coordinadora Madrileña de Salas Alternativas, y actualmente la componen 13 salas alternativas de la ciudad de Madrid: AZarte, Bululú 2120, Cuarta Pared, DT Espacio Escénico, El Umbral de Primavera, La Encina Teatro, Nave 73, Nueve Norte, Sala Tarambana, Teatro del Barrio, Teatro La Usina, Teatro Lagrada y Teatro Pradillo.
Eres gerente de Macomad y Comisario de los encuentros. ¿Cuál es tu día a día dentro de la Coordinadora?
Me dedico a llevar la gestión ordinaria de la oficina de Macomad, desde dónde damos apoyo, además de a nuestras salas socias, a las salas no socias en sus consultas y dudas sobre la situación actual, ayudas, cuestiones legales y artísticas, entre otras muchas cosas.
También trabajo, desde Macomad, en Surge Madrid, donde me encargo de la gestión de contenidos, la comunicación interna entre artistas y salas participantes y la complicada estrategia en redes sociales (Surge Madrid no tiene redes propias).
Este año, además, he tenido la oportunidad de comisariar, gracias a la confianza de las salas socias de Macomad, los I Encuentros Iberoamericanos Macomad 2020, que tendrán lugar los días 1, 2, 3 y 4 en Nave 73 y online vía Zoom y que deseamos, trabajaremos por ello, perduren en el tiempo y se conviertan en un referente anual para el Encuentro del sector escénico madrileño e iberoamericano.
¿Cómo surgen estos I Encuentros Iberoamericanos y qué pretendéis con ellos?
Los I Encuentros Iberoamericanos Macomad, se gestan en el proceso de trabajo en red Tejeredes, una metodología en la que llevamos tiempo trabajando en Macomad y nacen con el propósito de investigar, trabajar en red y compartir con la sociedad las experiencias de estos espacios dedicados a la creación contemporánea.
Los últimos desafíos, intensificados por la pandemia, hacen más necesarias que nunca estas jornadas dedicadas a reflexionar y difundir los nuevos retos del sector: la colaboración, la búsqueda de soluciones creativas, las alternativas sostenibles en un panorama de crisis, la diversidad de géneros, la creación contemporánea, la financiación de proyectos y el trabajo en red son algunas de los temas que plantearemos.
Contar quiénes somos, quiénes son todas las personas y entidades que trabajan por las artes escénicas en la ciudad (y fuera de ella) y reflexionar todas juntas sobre las necesidades del sector en estos momentos.
¿En un año como este, justamente, es cuando se hacen más necesarias iniciativas así?
Iniciativas como estas dónde encontrarse, intercambiar información y conocimiento, debatir sobre la situación del sector y disfrutar de la experimentación artística siempre son necesarias, pero ahora más que nunca, es un impulso que no podemos evitar.
¿Para quién están dirigidos?
Están dirigidos a todas las personas que estén interesadas en la gestión y creación escénica contemporáneas, que quieran conocer la realidad de los proyectos que presentamos y conocer cómo se llevan a cabo.
Se van a realizar de forma presencial y vía Zoom debido a las circunstancias especiales que vivimos. Imagino que analizar cómo está afectando a las salas independientes la pandemia será uno de los temas que abordaréis. ¿La unión, las sinergias y la colaboración entre agentes culturales ayudará a que se pueda superar mejor estos momentos?
Siempre, es la única manera de superar cualquier situación y más esta pandemia que nos atraviesa a todas por igual. Una de las ideas transversales es repensar cómo hacer redes de apoyo y trabajo colaborativo, cómo avanzar en estos momentos juntas. Veremos algunos proyectos que ya llevan tiempo trabajando en red. Estamos deseando aprender de su trabajo.
Vais a hablar en los encuentros de la financiación de proyectos culturales y en cómo comunicar de forma adecuada esos proyectos. ¿En qué vais a poner el foco ese día? ¿Crees que la gente sabe lo difícil que es levantar proyectos como un espacio privado de exhibición escénica?
Vimos necesario organizar un día que entre nosotras llamamos ‘herramientas básicas’. ¿Qué hay más básico que financiar y comunicar un proyecto cultural? Hemos invitado a personas que trabajan con la búsqueda de financiación pública y privada, responsables públicas de ayudas y subvenciones y expertas en comunicación cultural, para poner sobre la mesa algunas de las opciones que tiene el mundo cultural para poder llevar a cabo sus proyectos.
Sabemos lo difícil que es llevar proyectos como un espacio privado las que hemos tenido/trabajado/colaborado con ellos, las personas que hemos conocido sus entrañas. Mucha gente piensa que porque tengas el logo de una administración pública (o privada) en tu web, en tu cartelería, etc. estás viviendo de subvenciones y esta idea está muy alejada de la realidad. Si una administración pública o privada te da 300€ o te da 30.000€ estás obligado (lógicamente) a poner su logo, pero esto no quiere decir que te esté costeando lo que realmente vale sacar adelante un proyecto como una sala alternativa, por ejemplo.
Los días 3 y 4 vais a abordar la diversidad de géneros dentro de las artes escénicas y la comunicación cultural. ¿Superar los clichés acerca del género es uno de los grandes retos que tenemos que superar?
Sí, completamente, pero en todos los aspectos de nuestras vidas, no sólo en lo que a géneros artísticos se refiere. Vivimos en un mundo de etiquetas porque nos dan tranquilidad, calman los miedos que tenemos a lo no definido, pero yo me aferro siempre a esta cita de Wolf Vostell “son las cosas que no conocéis las que cambiarán vuestra vida”. A mí me ha ido bien, he podido desechar muchos prejuicios.
¿Por qué habéis decidido que sean Iberoamericanos?
En el proceso de diseño de los mismos, surgió la oportunidad de presentar RIEE (Red Iberoamericana de Espacios Escénicos) un proyecto de trabajo en red de reciente creación y del que forma parte la Red de Teatros Alternativos y en el que participan otras asociaciones y colectivos artísticos de Argentina, Chile y México. Nos pareció muy interesante que contasen el proceso en el que están ahora y saber cómo formalizar una red iberoamericana como RIEE.
A la vez, invitamos a Cristian Figueroa, artífice de la metodología Tejeredes y de cuya puesta en práctica en Macomad surgen estos Encuentros, a mediar una mesa redonda y proponernos proyectos de trabajo en red y nos propuso dos proyectos que nos parecieron muy interesantes de Ecuador y Chile y así es como se convirtieron en Iberoamericanos y así es como nos gustaría que siguiesen siendo, porque tenemos mucho que aprender de nuestras compañeras de América Latina.
¿Cuáles son esas cosas que tenemos que aprender de ellas?
Hay muchas cosas que aprender de ellas, desde cómo se financian hasta cómo trabajan en red. Es muy frecuente en Latinoamérica este trabajo colaborativo de tejer redes y trabajar en común. Aquí no nos faltan ejemplos, pero estamos bastante lejos del quehacer de los proyectos que podremos conocer en los Encuentros.
También se van a representar piezas escénicas dentro de Escena eMe. ¿A quién vamos a poder ver actuando en estos encuentros?
Escena eMe es como hemos decidido llamar al XVIII Circuito de la Red en Madrid, un proyecto de nuestras compañeras y colaboradoras de las Red de Teatros Alternativos. En Macomad conocemos perfectamente el Circuito de la Red, ya que muchas salas son también socias de la Red y participan del Circuito.
Yo llevaba mucho tiempo viendo la manera en la que podíamos hacer algo juntas Macomad y la Red y me pareció interesante poner en valor este trabajo que llevan tantos años realizando, además de ser un broche final perfecto para cada día de los Encuentros. Nos reunimos con ellas y bautizamos esta colaboración como Escena eMe, XVIII Circuito de la Red en Madrid.
Si echamos una vista atrás en tu trayectoria, en febrero se cumplirán 4 años del cierre de Espacio Labruc, la sala que fundaste junto a Eva Caballero. Ha pasado ya un tiempo suficiente como para hacer un balance. ¿Qué piensas cuando recuerdas esos tiempos? ¿Te sientes orgulloso?
El 28 de enero de 2017, exactamente. Estoy muy orgulloso de ese proyecto y ya te confirmo que Eva también. Fue un antes y un después en nuestra forma de hacer y de entender la gestión, de entender el arte y de entender la vida. Labruc fue un proyecto de vida y está presente en todo lo que emprendo, es parte de quién soy, de cómo hago las cosas. Labruc fue un “así hacemos nosotras las cosas”.
Cuando pienso en Labruc, pienso en que sólo pudimos hacer un 20% de todo lo que queríamos haber hecho, pero no pudo ser, se nos cruzó la burocracia. Igualmente lo que hicimos, lo hicimos bien y el reconocimiento que hemos recibido lo evidencia.
Tras todo este tiempo, con tu experiencia, ¿Volverías ahora a meterte en un proyecto así?
No, no volvería a meterme en un proyecto como Labruc, ya perdimos Eva y yo suficiente dinero y salud. Labruc fue un proyecto único que tuvo un tiempo y una motivación, ahora me interesan otras cosas más nómadas que ocupen temporalmente los espacios y no se establezcan en ellos, que el espacio sea un mero accesorio para que sucedan las cosas pero no el proyecto en sí.
Eres una persona comprometida que aporta muchas cosas al sector del teatro en esta ciudad. ¿Estás feliz con las cosas que haces? ¿Dónde te ves en el futuro? ¿Cuál sería tu trabajo soñado?
La felicidad es como el amor romántico y yo no creo en él. Creo que en la vida hay días de felicidad y otros de descenso a los infiernos, pero lo que es seguro es que me gusta lo que hago. Tal y cómo están las cosas, sólo puedo verme en estos momentos intentando encontrar unas palabras para agradecerte esta entrevista, para agradecer a todas mis ‘jefas’, las salas de Macomad, la oportunidad y la confianza que depositan en mi cada día y en estos Encuentros en particular.
No sé dónde me veo en el futuro, pero seguro que trabajando y facilitando proyectos culturales, que es lo que más me gusta y cuidando de mis plantitas, que me flipan.
“El arte consiste en un sacrificio de la vida misma. El artista sacrifica la vida en nombre del arte, no porque así lo quiera, sino porque no puede hacer otra cosa”. Louise Bourgeois
