EDITORIAL: NOS VA LA VIDA EN ELLO
Por José Antonio Alba
Y sin quererlo, casi sin poder recuperar el aliento de este desquiciado inicio de temporada, nos plantamos en diciembre para despedir el 2023.
Es inevitable echar la vista atrás y comprobar cómo ha sido el camino que nos ha traído hasta este preciso momento, y ser conscientes de dónde han salido todas estas heridas que nos marcan y de porqué, aún así, sonreímos.
Nos despedimos felices de ver que Godot continúa ‘so-breviviendo’ y además lo hace(mos) con la satisfacción de haber intentado realizar un trabajo lo más honesto posible -somos conscientes de que lo podemos mejorar y en ello trabajamos-, y del que, definitivamente, nos sentimos orgullosos. Seguimos aceptando retos, apren-diendo y corrigiendo errores, creciendo y celebrando… Tampoco nos queda otra, ¡nos va la vida en ello!, pero es que además nos gusta y nos divierte.
Pero también nos despedimos del año con un sentir pro-fundamente amargo por ver cómo las Artes Escénicas salen maltrechas de un año en el que, quienes debieran cuidarlas, las han vapuleado sin pudor, en algunos mo-mentos siendo lanzadas a los pies de los caballos para, acto seguido, levantarlas y, cínicamente, sacudirles el polvo de las solapas como si todo hubiera sido un des-cuido. No nos queda otra que continuar estando alerta. En esto también… ¡Nos va la vida en ello!
Con todo ello, decimos adiós a un año que nos ha traído nuevas compañías, grandes satisfacciones (¡Vivan los Premios Godot!) y las ganas intactas para encararnos con lo que esté por venir.
Godot abre diciembre destacando los 45 años del BNE en portada. También sobre danza tendremos un reportaje de la CND y una entrevista al coreógrafo Cheng Tsung-lung. Además, hablamos con Nuria Espert, Kulunka Teatro, Eneko Sagardoy, Ron Lalá, Companhia do Chapitô y el equipo de Los Gestos. Para finalizar, os dejamos algunas recomendaciones de teatro familiar de cara a las fiestas navideñas.
Por su parte, Godoff da el protagonismo de su portada a Tres días sin Charlie, la obra escrita por Quique Bazo y Yeray Bazo centrada en los atentados iniciados con el asalto al semanario de humor francés Charlie Hebdo. En este número también os traemos a Natalia Narbón, Álvaro Caboalles, Badia Albayati, Candelaria de la Serena y Noelia Pérez.
VOZ EN OFF: CON MIS MEJORES DESEOS
Por Sergio Díaz
Me pasa hace tiempo y sé que es un síntoma de hacerse viejo: No entiendo el mundo a mi alrededor. No entiendo lo que ha pasado en Argentina, ni lo que ha pasado en Países Bajos. No entiendo que mostrar una bandera palestina sea motivo para que te criminalicen. No entiendo lo que pasa en este país, por supuesto, ni que los chavales jóvenes anden locos por tener un ‘Lambo’ y se sigan comiendo dis-cursos machistas, homófobos y xenófobos cada día en las RRSS. Y no me hagan hablar de los pantalones rotos por todos los lados o con manchas de pintura… ¡Y que son más caros así!
En la entrevista que hice para el tema de portada (Tres días sin Charlie), me reuní con 7 jóvenes intérpretes y un autor de mi gene-ración (Quique Bazo). Charlamos durante un buen rato y fue un placer poder escuchar lo que las nuevas generaciones tienen que decir (siempre lo es, y por eso me flipa este trabajo). Es interesante conocer sus puntos de vista y aprender de sus reflexiones e inquietudes. Quique Bazo y yo somos de tierras muy distantes (canario él, castellano yo). Pero yo sentía que había una conexión total con todas sus reflexiones y vivencias, como si nos hubiéramos criado en la misma familia. De los 7 jóvenes me separaba un mundo, la distancia sideral de tener 20 años más que ellxs en esta sociedad donde todo fluye con tanta rapidez. Llegué a la conclu-sión de que no lo tienen fácil, la verdad. Es complicado lidiar todo el día con el ruido en su cabeza. El ruido que sale de estar hiperconectado. Yo, como no entiendo nada y he perdido las ganas por entender (no tengo RRSS), dejo el móvil en silencio y ya no hay ruido (sólo ecos lejanos de la com-batividad que un día tuve). Ellxs están todo el día lidiando con gritos (no de forma literal, se entiende). No son una generación de cristal, para nada. Tienen las mismas ganas, ambición y necesidad de que su voz sea escuchada que teníamos nosotrxs 20 años atrás. Yo, aunque no os comprenda del todo, os quiero dar un abrazo a todxs (no de forma literal, se entiende, y tampoco a todxs -¿eh, Vito Quiles?-). Un abrazo en forma de comprensión, diálogo, cercanía, entendimiento, escucha, cuidado… Un abrazo que os aliente a ser valientes para construir una sociedad mejor, para que vosotrxs, lxs jó-venes, desterréis el ruido y podáis construir un mundo en el que merezca la pena estar, no la mierda que os estamos dejando. Feliz Navidad. Firmado: Un ‘boomer’.