La obra DNI o ADN, elige es la octava propuesta escénica del grupo DoceCanciones. Se trata de una pieza en la que, en el transcurso de una conversación mantenida durante toda una noche en una habitación de hotel, van surgiendo verdades difíciles de aceptar, recuerdos casi olvidados, sentimientos encontrados, actitudes crueles y egoístas, decisiones generosas.
Paralelamente al diálogo de Rodrigo y Román, los dos protagonistas de la obra, van apareciendo en su recuerdo escenas vividas por ellos mismos y por las personas que han tenido y tienen más importancia en sus vidas.
DNI o ADN, elige no plantea ninguna tesis ni trata de ser didáctica. Se limita a hablar de engaños, ambición, amor, rebeldía, celos, coraje, renuncia, desconfianza, o sea, los mimbres con que se tejen las relaciones humanas.
Todos los recuerdos, las verdades, las mentiras, las acusaciones y las sorpresas que pueden surgir en una conversación a lo largo de una noche cuando dos antiguos amigos se encuentran después de doce años de evitarse.
Esta historia puede parecer insólita, pero, con distintos nombres, fechas y localizaciones, podría darse en cualquier lugar del mundo. Y seguro que se ha dado.