Jugar con fuego es un clásico de Strindberg llevado a nuestros días de la mano de Turbulencias Teatro. Es una comedia fresca y ligera que nos acerca a situaciones que hoy están en boca de todos. Amor, celos, placeres y límites.
Una familia. Dinero. Juegos. Y calor, mucho calor. El verano y la llegada de Axel, un viejo amigo de la familia, harán tambalear los cimientos de las relaciones que, en apariencia, rebosaban confianza.
Desde que se fue el año pasado el ambiente es muy diferente, más cargado. Hay silencios por los pasillos, miradas discretas y secretos muy bien guardados.
¿Aguantarán los secretos semejante calor?
Los sentimientos tienen la particularidad de que se comunican por sí solos y el fuego se extiende.