Llega al Teatro Amaya una disparatada comedia en la que la carcajada está asegurada.
Tres amigas deciden abrir una pastelería, pero la cosa no acaba de funcionar y una de ellas propone ampliar el negocio ofreciendo a las clientas masajes con final feliz en la trastienda del local… un poco como Sweeney Todd pero con un resultado nada truculento… Como os podéis imaginar, la comedia con los malentendidos a ritmo de vodevil moderno, ¡está bien servida!
Pero además de una comedia de enredos y situaciones divertidas, Oh mami! nos presenta un mundo de mujeres y de hombres en busca de la identidad personal, de la felicidad y del placer.