En septiembre de 1939 las fuerzas del Tercer Reich invadieron Polonia.
En el gueto de Varsovia, el orfanato dirigido por el doctor y pedagogo Janusz Korczak y su inseparable colaboradora Stefania Wilczynska, se convirtió en un archipiélago de 200 islas, los 200 niños que allí sobrevivían en medio de un océano de suciedad, muerte y destrucción, hasta su deportación en agosto de 1942 al campo de exterminio de Treblinka.
Esta obra es un homenaje a la vida, a la resistencia, a la dignidad del ser humano, a los miles de judíos que sufrieron el holocausto y a todos los que perdieron su vida luchando y creyendo que el mundo puede ser un lugar mejor de lo que jamás imaginaron.