Un conflicto rural, la búsqueda continua del deseo, la angustia que genera el tiempo perdido, el amor no correspondido, el matrimonio sin amor, el sacrificio por los demás… Personajes que enfrentan el deterioro de sus vidas, esperando un cambio de fortuna que nunca llega, la ilusión de un futuro mejor…
Mamet y Chejov discuten en la Calle 42, y no escuchan razones… Sus personajes persiguen un ideal imposible, volver atrás, volver a comenzar, ajustar cuentas con el pasado, y asesinar al causante de esta tragedia…
Un grupo de actores que se encuentra en un viejo teatro para ensayar El Tío Vania de Chejov, y a medida que avanza el encuentro, confunden la realidad con la ficción… Así empieza todo, los personajes ponen al desnudo sus contradicciones, eso que los hace tan humanos, gente que atraviesa situaciones con sus virtudes y sus defectos, como sucede en la vida, apasionados, a menudo desmedidos y a contrapelo de sí mismos…
La búsqueda continua del deseo, una situación inesperada, una escena inestable, donde la melancolía se confunde con el humor, el humor con la tragedia… Destruir el paso del tiempo con fugaces triunfos y desoladores fracasos… Un giro al vacío que culmina en desastre, porque mientras se está deseando una vida mejor, se desaprovecha la que se está viviendo.