Besugo por las paredes es un monólogo absurdo, como la vida. Como dice la intérprete, Diana Lázaro: «Hablemos claro, la vida es una estafa, una chapuza monumental, un desastre, y el ser humano es un tarado que se cree que puede ser feliz, en fin, lo dejo que me caliento. Total, que este monólogo muestra todo este sinsentido superbién».
Este espectáculo es el resultado de que Detrimento López (el autoproclamado icono de la estupidez en Instagram) no pudiera irse a Cuenca a hacer un retiro espiritual para meditar sobre el sinsentido de la vida. Su hija de 9 años, harta de oírla, la convenció para que ampliara su público; Y aquí está, decidida a compartir con el mundo todo lo que no sabías que sabías de la vida y a que nos riamos de todo para no suicidarnos.