Por Sergio Díaz
Fotos: marcosGpunto (fotos de ensayo)
Creer nuestras propias mentiras
Que Juan Mayorga es uno de los grandes dramaturgos de nuestro tiempo es una obviedad. Se ha ganado a pulso, con su enorme labor escénica, que suscite interés cualquier cosa en la que participe… aunque sea someramente. Pero afortunadamente este no es el caso, porque El Mago es una obra creada y dirigida íntegramente por él mismo. Pura esencia Mayorga. Además de verdad, porque ha sido creada a través de una vivencia personal (como creo que surgen casi todos los textos, de una experiencia propia seguramente poco interesante que, gracias a la magia de las palabras y al talento para expresarla, adquiere unos tintes relevantes que la hacen digna de ser compartida). En un Congreso Mundial de Magia Juan Mayorga se prestó voluntario para participar en un número de hipnosis. El hipnotizador realizó diversas pruebas a los conejillos de indias, quizás para averiguar sus posibles capacidades para ser engañ… hipnotizados, y Mayorga fue finalmente descartado, con lo cual no disfrutó con la experiencia de ser hipnotizado en directo. Pues alrededor de este anécdota se ha construido este espectáculo que cuenta con un gran elenco: Clara Sanchis, José Luis García Pérez, Ivana Heredia, Julia Piera, Tomás Pozzi… y la gran María Galiana (la eterna abuela de Cuéntame y casi de media España), que a sus 83 años sigue dando lecciones sobre los escenarios. Es una obra donde, a través de los trucos de magia de un prestigitador, se reflexiona sobre la concepción de la realidad y la fantasía.
Un mago, encima de un escenario, con pequeños gestos ensayados provoca el mayor de los asombros. Por un momento es imposible pensar que eso que han visto tus ojos no es real. ¿Cómo no va a serlo si acabas de presenciarlo? Pero sabes que no lo es, que la magia no existe. Solo existen diferentes formas de percibir la realidad, diferentes formas de mostrarla. Como tantas veces hemos hecho nosotros contando una historia a los demás (incluso a nosotros mismos) que nos engrandece, cuando la verdad es que sucedió algo mucho más pequeño… si es que sucedió.
¿Acaso nuestra vida, como los trucos de magia, no es una mentira?