Paco Bezerra es uno de nuestros jóvenes dramaturgos con más recorrido. Ya consiguió el Premio Nacional de Literatura Dramática en 2009 y el Premio Calderón de la Barca en 2007 por este texto. Casi una década ha pasado desde que conocimos la relevancia de esta obra. En todo este tiempo se puede pensar que muchas habrán sido las propuestas escénicas que lo hayan desarrollado, pero no, aquí apenas se han visto algunas lecturas dramatizadas y montajes menores. Eso sí, la obra ya se ha podido disfrutar en portugués, alemán, inglés… y es que se ha estrenado antes en otros países que aquí. Pero por fin la podremos disfrutar. Por fin se puede saldar la deuda que contrajimos con este texto que está dirigido por Luis Luque.
Indalecio convive con el miedo y la desesperación de haber nacido en el sitio equivocado: un lugar cubierto bajo kilómetros de plástico en donde los prejuicios y la superstición conviven con numerosas plagas de insectos gigantes. La desaparición de Farida, la chica de la que se encuentra enamorado, y un misterioso invernadero en el que está terminantemente prohibido entrar, son el detonante para que Indalecio se decida a emprender un peligroso y decisivo viaje de la mano de su hermano Ángel, un hombre que, a causa de una extraña enfermedad, se ve obligado a ir enfundado en un traje protector de color blanco.
Es esta una historia llena de fantasmas, tomates y violencia, que reflexiona acerca del doloroso momento en el que uno decide dejar de engañarse a sí mismo, es honesto y trata de buscar la verdad. Una verdad que Bezerra plasma en sus creaciones con grandes dosis de imaginación y una mirada cargada de realidad. Sergio Díaz