#Incubatio – Circumambulatio rescata una práctica ancestral, la incubatio, técnica orientada precisamente a un proceso de re-asociación y re-organización de la complejidad psicológica del ser humano con el fin de posibilitar el desarrollo de un nuevo centro de la personalidad. Un centro que funciona como un imán sobre los procesos de lo inconsciente que se mueven en espiral a su alrededor. Un centro que no es más que el punto en el que la psique se funde con el cuerpo.
En este sentido, #Incubatio – Circumambulatio es una obra basada en la práctica de la Incubatio, nombre que tuvo su origen en Asia occidental, en los lejanos márgenes del mundo griego oriental, y que se extendió y desarrolló durante el periodo clásico a lo largo del sur de Europa, llegando incluso a la Península Ibérica. Una técnica de sanación que consistía en acostarse en un recinto sagrado, una caverna o templo, con el fin de entrar en un estado más allá de la consciencia diurna hasta que finalizaba con una visión o sueño con capacidades curativas. En estos rituales, el enfermo o persona que se iniciaba en esta práctica no estaba sola, había personas encargadas del lugar llamados Iatromantis que acompañaban al yaciente a comprender lo que necesitaba saber sin interferir en la experiencia. Esta técnica era practicada en la Grecia Clásica por personas como Parménides o Pitágoras, que hemos considerado habitualmente como filósofos pero que en realidad eran poetas cuyos poemas eran textos mágicos. En aquellos tiempos el poeta era un mago, un chamán. El canto del poeta era sencillamente un viaje a otro mundo, a otro estado de consciencia. Y su viaje era su canto y su danza.
#Incubatio – Circumambulatio es una creación de Muriel Romero y Pablo Palacio que explora en un formato escénico este rito ancestral orientado a la inducción de episodios de sueño con fines curativos, una práctica que está en la base de la cultura occidental y conforma además los cimientos de la psicoterapia moderna.
#Incubatio – Circumambulatio es una obra que combina danza, música electroacústica y modelos de inteligencia artificial, con el fin de profundizar en imágenes arquetípicas asociadas a estados de trance con el apoyo de tecnología interactiva de vanguardia especialmente creada para esta obra. La obra pretende precisamente poner de relieve la importancia de conectar con una parte inconsciente del ser humano cada vez más olvidada, más colectiva, que se expresa en un mar de imágenes o formas que, ocasionalmente, acceden a nuestra consciencia a través de los sueños o de estados mentales anormales. Un estado que habla una especie de lenguaje que hace de puente entre la manera en que expresamos conscientemente nuestros pensamientos y una forma de expresión más primitiva, más colorida, más gráfica: un lenguaje onírico que apela directamente al sentimiento, a la emoción y, por lo tanto, al cuerpo.
La pieza propone un nuevo hashtag, #Incubatio, que paradójicamente invita a una cierta desconexión de los medios digitales que habitualmente nos envuelven y a la conexión con uno mismo mediante una tecnología interactiva especialmente diseñada para conectar con nuestro cuerpo y traducir la danza en sonido, imagen y luz.



