Juan Carlos Corazza: "Me atraen las propuestas que cuidan el Arte, que nos hacen reflexionar y que conmueven"
El pasado 8 de febrero, en la 39ª edición de los Premios Goya, Eduard Fernández le nombró cuando subió a recoger el Goya a Mejor Actor por su trabajo en la película Marco. El reconocido maestro y director Juan Carlos Corazza sigue marcando las carreras de algunos de los mejores actores y actrices de nuestro país… y de los que pronto lo serán.
Ahora, además, se ha lanzado a abrir un nuevo espacio teatral junto a Javier Bardem, Rafa Castejón y la familia Portela. Se trata de Espacio Zafra, un teatro de 120 butacas situado en el Paseo del Marqués de Zafra 35.
Este nuevo espacio teatral se inaugura con con Cuento de invierno, una versión del texto de Shakespeare dirigida por el propio Juan Carlos e interpretada por Alicia Borrachero, Laura Calvo, Rafa Castejón, Laura de la Isla, José di Ferri, Ana Gracia, Richard Holmes, Laura Ledesma, Eduardo Merelo, Pol Monen, Manuel Morón, Ben Temple y Octavio Vellón.
Sé que es difícil comenzar así, pero tiene mucho de verdad… ¿Ese niño que nació en La Pampa argentina algún día se imaginó siendo alguien tan reconocido e influyente dentro del teatro español contemporáneo?
Cuando era niño mi imaginación no volaba hacia el futuro, creaba obras en las que embarcaba a mis amigos del pueblo y así mi presente se llenaba de alegría. Siendo adolescente, tras representar una obra que escribí, dirigí y protagonicé, sentí la emoción, la fuerza y la fe en que mi camino sería el teatro.
He podido escucharte decir que tu padre fue tu primer maestro, un maestro que no empleaba palabras, que hablaba poco pero que exigía mucho. ¿Cómo es el maestro Juan Carlos Corazza para sus alumnos y alumnas?
Sí, mi padre hablaba poco e insistía en que el verdadero aprendizaje se produce mirando, sentí una gran soledad, pero me convertí en alguien muy observador. Más adelante, durante los años que estuve junto a mi maestro Carlos Gandolfo, disfrutaba viendo su agudeza para reconocer lo que hay detrás de las palabras y de los comportamientos humanos. Ellos dos alimentaron un aspecto de la pedagogía y del arte que me apasiona: desarrollar nuestra capacidad de vernos y de ver al otro. Descubrir los dones de cada uno, la peculiaridad de la persona para crear la del personaje. Cuando me equivoco o no veo adecuadamente, necesito reparar, comprender mejor, transformar la dificultad en crecimiento para seguir avanzando, y es una suerte cuando hay disponibilidad en ambas partes. Trabajar con estudiantes o profesionales para mí es una oportunidad de aprender juntos algo nuevo. Mi trabajo ha ido cambiando mucho y espero seguir así. La rutina puede ser enemiga del arte y también de la pedagogía teatral. Así que espero servir a mis alumnos para ser mejores artistas y creadores. También espero no aburrirles.
¿Cuáles son las claves de la formación que se imparte en Estudio Corazza para la Actuación?
Las claves para la formación son diferentes en cada intérprete y varían según su evolución. Nuestra pedagogía atiende al desarrollo de las cualidades expresivas, la técnica y la forma personal de actuar que pueda beneficiar a cada estudiante. Impartimos una formación para teatro y audiovisual, que incluye voz, movimiento, historia del arte, del teatro, del cine.
En interpretación son fundamentales el trabajo con el texto y lo que está más allá de lo literal. Carácter, comportamiento físico, emocional, mental y la relación con el espacio. Entrenarse en el cuidado de si mismo y de los compañeros de ficción. Ejercitarse en entrar y salir de los personajes revelando conflictos y diversidad humanos, con respeto y sentido del humor siempre que sea posible. Cultivar la comprensión y el gozo por los grandes autores, que son los grandes maestros.
¿Qué es lo más importante que debe saber del Estudio Corazza para la Actuación alguien que quiera formarse para cerciorarse de que está en el sitio adecuado?
Estar dispuesto a comprometerse con un proceso y a no autoengañarse con lo que puede y lo que todavía no puede hacer. Hay cosas que va a aprender rápidamente si trabaja con honestidad, respeto y decisión. En otras necesitará más tiempo y mucha pasión. En esta profesión la salud en todos los niveles es muy importante, junto con la paciencia y la perseverancia. Si lo que quiere es fama y aplausos inmediatos, estará en el sitio equivocado.
Estás en Madrid desde el año 1990… ¿qué ha cambiado en la escena teatral independiente madrileña en todos estos años?
Ahora hay más escuelas y esto ha ayudado a que surjan más compañías, propuestas, y diversidad. El coraje y la generosidad de producir es una oportunidad para la evolución de la escena, aunque la cantidad no implica calidad. Me gustan especialmente las propuestas que buscan ir más allá de la forma. Me entristece cuando veo un esfuerzo enorme y una gran ilusión al servicio de algo poco profundo, vulgar o demasiado ambicioso. La intención de inventar nuevas formas, de impactar, dar lecciones o de resolver un psicodrama personal en el teatro a mí no me interesan; me da pena cuando veo obras que manipulan al espectador o lo infantilizan, no me gusta lo banal. Me atraen las propuestas que cuidan el Arte, que nos hacen reflexionar y que conmueven. Un teatro que amplíe nuestra visión humana y social, que nos acerque al misterio, y en el que no falte el sentido del humor.
Y en ese contexto has decidido dar un paso más abriendo tu propio espacio de exhibición. ¿De dónde nace esta idea? ¿Y quiénes son tus compañeros de viaje?
Desde hace décadas venimos presentando montajes en diversos escenarios de Madrid y, finalmente, ahora tenemos un espacio propio de creación y exhibición para alumnos y profesionales vinculados al entrenamiento del Estudio del Actor. Está siendo fundamental el apoyo de la Cooperativa del Estudio, Rafa Castejón, la familia Portela y Javier Bardem.
Siempre es necesario tener más espacios de calidad en los que ver buen teatro y que la gente joven pueda mostrar su talento. ¿Gente como Javier Bardem, quien te acompaña en esta aventura, lo hace en parte por un compromiso con el intérprete joven que fue?
Entre las muchas cosas que compartimos con Javier está nuestro amor por la actuación, la formación y el deseo de abrir caminos para los jóvenes. Apostamos por un futuro en el que el arte continúe siendo un alimento esencial para nuestra humanidad y la sociedad.
¿Cuál es la línea de programación que queréis articular?
Esperamos poder ofrecer un teatro que resulte necesario, que nos haga bien a todos, que se aleje de lo convencional o superficial, y que cultive la reflexión y el encuentro.
En la presentación habéis dicho que es un espacio independiente de la escuela, pero ¿va a ser también un espacio de visibilización para propuestas que se gesten en Corazza y para la compañía allí creada?
Por supuesto la escuela y Espacio Zafra Teatro se relacionan. Los alumnos actuales presentarán sus muestras y clases abiertas, serán bienvenidas las compañías de exalumnos, como las propuestas de otros profesionales de teatro y de danza.
¿Por qué habéis decidido comenzar vuestro camino programando una obra de Shakespeare?
Me encanta Shakespeare, su sabiduría me conmueve, su sentido del humor y su arte con la palabra y el ritmo encienden mi imaginación. Es un gran maestro y disfruto aprendiendo con él. Así que tuve claro que quería comenzar con una obra suya y elegimos Cuento de invierno.
¿Cuál es el motivo de haber elegido esta obra y no otras de las tantas que tiene el gran dramaturgo inglés?
Es una obra que siempre me ha gustado mucho. Pertenece a la última etapa de Shakespeare, es un cuento de sabiduría misterioso y complejo. Una de sus obras con más personajes, situaciones y asuntos completamente inverosímiles. Un gran reto y una fiesta creativa para quienes la hacemos y para los espectadores. Es un texto lleno de engaño, locura y transformación. También se habla de la inocencia y la justicia, y las mujeres de la obra poseen una gran fuerza. Trabajando en el texto hemos encontrado otras claves interesantes y confiamos en que los espectadores sabrán descubrirlas.
Es una obra compuesta por cinco actos y unas 15 escenas. ¿Cómo es la versión que has preparado?
Junto con Ana Gracia, Alicia Borrachero, Ben Temple y toda la compañía, hemos cuidado especialmente la traducción. Respetando el primer folio de Shakespeare, hicimos una investigación rigurosa sobre los significados de las palabras en aquella época y la relación con el español, cuidándonos de no hacer invenciones o de tratar de embellecer un texto tan poético como directo. Atendimos también al sonido, el ritmo y otros aspectos importantes del texto original, que nos ayudaron a redescubrir escenas y personajes, y que me permite estar en contacto con lo que creo es el corazón de esta pieza.
¿Cómo se afronta el tener que eliminar o retocar palabras o frases de alguien a quien se admira?
Pues se hace con mucha humildad, respeto y coraje.
¿Cómo se consigue conformar un elenco de tanta gente y de nombres tan maravillosos como Alicia Borrachero, Rafa Castejón, Ana Gracia, Manuel Morón, Laura Ledesma… para una obra exhibida en un espacio de 120 butacas?
Rafa, Alicia, Ben, Manuel, Ana, Betina Waissman y yo también somos productores del espectáculo. Poner en pie este proyecto es posible gracias a la entrega de ellos junto a la de los jóvenes, con quienes hicimos una cooperativa. Todos se han formado en el Estudio y algunos dan clases habitualmente. Es un sueño realizado con amor, placer, sacrificios y mucha generosidad.
¿Me puedes adelantar algo de lo que iremos viendo en esta segunda mitad de temporada en Espacio Zafra?
Pronto se podrán ver las muestras de alumnos del Estudio abiertas al público, que son una experiencia teatral singular para todos.
¿El abrir tu propio espacio de exhibición abre también la posibilidad de poner en marcha un texto propio?
Espero poder hacerlo, sí, es una de las ideas, pero el tiempo dirá.
¿Cómo o con qué te gustaría que la gente identificase Espacio Zafra dentro de un tiempo?
La palabra Zafra tiene que ver con cosecha, y ésta se realiza después de sembrar y cuidar el cultivo. Me gustaría que este sea un lugar donde poder compartir frutos nobles y sabrosos.
¿Levantar un espacio independiente hoy día es un acto de valentía, de temeridad o de rebeldía?
Es todo eso que dices, además de que es algo que se hace con mucho esfuerzo, amor y fe.
¿Cuál es hoy el sentido del Teatro?
Desde los griegos, y antes aún, el Teatro es una necesidad, una vía de conocimiento y encuentro. Revela nuestras luces y sombras, y puede traer conciencia y transformación. En una época que propicia la desconexión de nosotros mismos y de los demás, en la que sobrevivimos distrayéndonos o disociándonos del sufrimiento al que nos someten unas condiciones de vida cada vez más difíciles, el teatro puede ser un antídoto y un alimento para el alma.
El Teatro no pondrá fin a las guerras, la destrucción planetaria o el hambre. Pero puede tocar nuestras mentes y corazones, abrirnos a las posibilidades de encuentro con los demás y con el misterio.
Revista GODOT es una revista independiente especializada en información sobre artes escénicas de Madrid, gratuita y que se distribuye en espacios escénicos, además de otros puntos de interés turístico y de ocio de la capital.