Personajes arrinconados en el lado de una carretera. Un espectáculo sobre la mujer, el feminismo, la prostitución y el machismo. Ninguna mujer nace como una ortiga en el borde de un camino.
Se trata de un texto atrevido y transgresor para 4 mujeres atadas a una cruda realidad. Podremos ver sus esperanzas, sueños, costumbres, irritaciones y todas sus caras. El amor o su negación, la impotencia, la ternura, rabia, dolor y humor en 4 historias entrelazadas por la figura del putero.
El escenario se transforma en una cuneta al aire libre, el lugar de ‘trabajo’ de estas prostitutas. Es esa carretera, rotonda, barranco, camino que desde la ventanilla de nuestro coche hemos visto alguna vez…
Ponemos en acción y visibilizamos una parte de la sociedad que suele ser invisible, partimos de la realidad de estas mujeres añadiendo un punto poético y coreográfico. La propuesta incluye diversos puntos de vista, voces que viajan en diferentes direcciones. Ellas conviven en la contradicción que otorga a la obra giros muy interesantes.