Esperanza y Manuela, son dos señoras de avanzada edad que se ven abocadas a vender la nuda propiedad de su vivienda en una subasta y esto las enfrentará a la cruda realidad, tendrán que defender su dignidad para no acabar pisoteadas como bichos.
En una sociedad cada vez más deshumanizada las desgracias están para sacarles el máximo rendimiento económico; y si hoy es un ‘tinder del ladrillo’, ¿mañana qué será?
Hagan juego, señoras y señores, la vida está en venta.