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El Teatro de la Zarzuela inaugura la temporada 17/18 con la opereta Le chanteur de Mexico, una obra compuesta por Francis Lopez para el célebre y celebrado artista vasco Luis Mariano, y se estrenó, con un éxito arrollador, el 15 de diciembre de 1951 en el Théâtre du Châtelet de París.
Es la primera vez que esta opereta se estrena en Madrid y en castellano. Daniel Blanco, director de La Zarzuela, ha señalado que este montaje “sitúa la trama en el rodaje de una película de cine ingeniosa, divertida y por momentos ciertamente espectacular”. La versión está firmada por el director de escena Emilio Sagi, quien ha trabajado sobre el libreto de Félix Gandera y Raymond Vincy, pero que ha dotado el montaje de una nueva dimensión más contemporánea. Así la propuesta nos traslada a un escenario fantástico, al más puro estilo kitsch, donde se recrea un mundo tropical, sofisticado, en tecnicolor como corresponde a ese tipo de cine que persigue el gran espectáculo y que es precisamente el universo en el que se suceden todas las tramas de la historia. Una escena repleta de situaciones cómicas entre elementos del folclore mexicano; llena de grandes flores y frutas, de colores necesariamente llamativos y, sobre todo, de buena música.
El reparto está encabezado por la actriz Rossy de Palma -en el papel de Renata, la‘diva insoportable- y cuenta con los tenores Jose Luis Sola y Emmanuel Feraldo, el barítono Luis Álvarez y las sopranos Sonia de Munck y Sylvia Parejo. La obra, bajo la dirección musical de Óliver Díaz, cuenta las aventuras y desventuras de un joven ingenuo que en París descubre el amor y el éxito.
