Una obra que se cuela en la habitación de una joven que acaba de sufrir una de las situaciones más duras y violentas a las que se tiene que enfrentar una persona. Y que hoy, en a las alturas de civilización en la que nos encontramos, ya no deberían existir, pero el patriarcado y el machismo imperante sigue promoviendo y consintiendo cada día, porque las mujeres siguen siendo un objeto en muchos de los casos.
Lara, la protagonista de la obra es un personaje que sirve de excusa para verter todas esas vivencias, todas las voces que han sufrido y vivido este suceso. Un grito que pretende romper la positividad que se les obliga a darle a las víctimas de agresión sexual, a tirar adelante, a perdonarse… Una crítica al poner al cuerpo oprimido siempre en el foco y en la responsabilidad. Desde la voz del propio sujeto oprimido, nace esta obra de teatro, un grito de ‘zentenials’ rabiosas que buscan sumar alianzas para dar la vuelta a todo.