Aloscopio es una obra de autoficción en la que M., el autor, está encerrado durante la cuarentena de 2020 en la residencia de estudiantes en la que trabaja. Puesto que todos los estudiantes de la residencia se han vuelto a sus hogares, M. se queda completamente solo en el edificio y empieza a escribirse a sí mismo y a su experiencia, con la intención de trazar un encuentro con un lector que no existe, un público que no está, una compañía que sólo está al alcance a través de la tecnología.
Como si de un astronauta se tratara, la escritura le permite observar su mundo a través de la ventana de su nave espacial. Los únicos ojos que lo observan son los suyos propios en el reflejo del cristal.