Manuel Liñán, destacado coreógrafo y bailarín, presenta su espectáculo Muerta de amor en el Teatro de la Zarzuela.
Un espacio donde conviven los deseos, que se nutre de los anhelos del pasado, y los sentimientos pueden recuperarse.
En esta nueva creación, Manuel Liñán busca el sustento a través de la emoción y la carne, un viaje que lo invita a descubrir la necesidad del ser humano por relacionarse, el acercamiento entre los cuerpos, lo que los impulsa y sus consecuencias.
Un espectáculo que cuenta con 12 artistas en escena, que serán los encargados de guiarnos por este pasaje coreográfico, con carácter de copla, que apunta a diferentes atmósferas: el deseo, la fantasía, la provocación… necesidades que emanan de nuestra propia intimidad, de nuestro cuerpo, y hacen sostener nuestra energía vital.
El énfasis por invocar estos campos emocionales, provocado por las relaciones, me hace mantener un constante deseo, que se ve reflejado en mi baile.
PD: Enamórate, tía. Bailas mejor.





